La Subdelegación del Gobierno, Junta de Castilla y León y Diputación de Zamora han alcanzado un acuerdo que, según el delegado del Gobierno regional, da certidumbres a los pueblos y garantiza que ningún espectáculo taurino de este verano quedará sin celebrarse por ausencia de delegados de autoridad en los pueblos. Así, «como se venía haciendo hasta ahora» y siempre según Fernando Prada, la figura del responsable del festejo taurino estará ocupada por un guardia civil de servicio siempre que sea posible, que la plantilla que está en activo en ese momento lo permita y que no haya necesidades más urgentes que atender.
En caso de que la Guardia Civil no pueda cumplir estas funciones las asumirá alguno de los cuatro funcionarios del Estado que han manifestado que están dispuestos a hacerlo a cambio de una gratificación económica. Y, en última instancia, se echará mano de los funcionarios de la Diputación de Zamora (han manifestado su conformidad a asumir estas funciones 46 personas, según ha indicado Prada).
«El objetivo de la reunión» que se ha mantenido en la mañana de este lunes era «dar seguridad y certezas a los pueblos» con festejos taurinos programados durante los festejos populares. Sobre las retribuciones, el delegado explica que dependen de los ayuntamientos y que se está trabajando para que las cantidades sean las mismas en todos los pueblos. De seguir adelante con las cifras que hace unas semanas puso sobre la mesa la Diputación de Zamora, los delegados de autoridad cobraría 120 euros de dietas y 26 céntimos por kilómetro recorrido desde su lugar de residencia hasta el pueblo que celebre el festejo.
Este año, hasta el momento y según las cifras proporcionadas por la Junta, se han celebrado en la provincia trece festejos taurinos. «El 31% ha estado cubierto por guardias civiles como delegados de autoridad y el resto, por funcionarios de la Administración Periférica del Estado y de la Diputación», subraya Prada.