«Se ha hecho larga esta espera». Con esa frase ha resumido la presidenta de las cofradías de Zamora, Isabel García Prieto, su sensación tras el anuncio que ha realizado esta tarde la directora general de Vivienda, Arquitectura, Ordenación del Territorio y Urbanismo de la Junta, María Pardo. La responsable autonómica se ha desplazado hasta la ciudad para comunicar que este martes se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y en la Plataforma de Contratación del Estado la licitación de la obra del Museo de Semana Santa.
Efectivamente, como ha constatado García Prieto, el anuncio ha llegado tras un largo parón en los trabajos, una vez la anterior adjudicataria optó por abandonar la obra ante el alza de los costes. Todo, cuando ya se había derribado el museo antiguo. A partir de ese momento, las administraciones implicadas en la financiación, Junta (57%), Ayuntamiento (21,5%) y Diputación (21,5%), tuvieron que replantearse el escenario y planificar una nueva licitación con un precio bastante más elevado.
De hecho, de los 7,7 millones de euros de la anterior licitación, se pasará esta vez a 10,05 millones: «Ahora, las empresas tendrán un periodo de 30 días para presentar sus ofertas, continuará el proceso y, desde que se inicien las obras, habrá un plazo de 24 meses para la finalización», ha aclarado María Pardo, que antes de ofrecer estos datos en rueda de prensa se ha reunido con la delegada territorial de la Junta, Leticia García; con el alcalde de Zamora, Francisco Guarido; con el presidente de la Diputación, Javier Faúndez; y con la citada García Prieto.
Pardo ha aclarado que durante la licitación pueden suceder muchas cosas, desde la presentación de ofertas con bajas temerarias a la presentación de reclamaciones tras la propuesta de adjudicación, pero ha asegurado que, si todo marcha dentro de unos parámetros razonables, las obras podrían dar comienzo nuevamente en octubre de este año. Eso permitiría que el museo estuviera construido en ese mismo mes de 2026, con la Semana Santa de 2027 como horizonte.
Lo quede momento sigue en el aire es el tema de la musealización: «Falta una administración», ha constatado Pardo. Flotando sobre el ambiente de la comparecencia, el compromiso del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que el Estado financiaría esa parte, que además es la menos costosa. Sin embargo, el Ejecutivo central no termina de refrendar ese compromiso, a pesar de la insistencia de las otras tres administraciones.
«No ha habido una respuesta expresa por su parte», ha reiterado Pardo, que tampoco ha querido mojarse demasiado sobre qué sucedería en el caso de que el Estado se bajara definitivamente del proyecto. Eso sí, ha afirmado que las administraciones que forman parte ahora de la obra no estarían dispuestas a permitir que el museo quedara vacío.
Tras las palabras de la directora general, tanto Guarido como Faúndez han reclamado también la implicación del Gobierno, mientras que García Prieto ha expresado su satisfacción por ver de nuevo una fecha en el horizonte para el inicio de las obras.
Un pequeño escollo en una vivienda anexa
Al hilo de esta obra, María Pardo ha explicado que la revisión del estado de una de las viviendas anexas al futuro edificio se hace necesaria «para dar certeza y seguridad» de que no se caerá por culpa de las obras del museo, pero la propiedad del inmueble rechaza el permiso para acceder al mismo y proceder a ese trámite técnico. El asunto está judicializado a la espera de que la Junta pueda actuar.