Alrededor de 400 personas (a las que hay que sumar las que hayan encontrado acomodo en otros lugares) se encuentran desalojadas de sus viviendas de Molezuelas de los Caballeros, Uña de Quintana y Cubo de Benavente, donde la situación se antoja más preocupante, por el incendio declarado a las dos y media de la tarde de este domingo en el término municipal de Uña.
Aunque en un principio los vecinos de Molezuelas fueron enviados al albergue de Rionegro del Puente, en previsión de que la situación se alargue, todos los desalojados que lo han requerido se encuentran ahora en el polideportivo de Camarzana de Tera, bajo un calor sofocante que unos grandes ventiladores no alcanzan a disipar siquiera levemente.

La situación general es de preocupación, especialmente entre los vecinos de Cubo de Benavente, donde el fuego está más cerca de la zona habitada. Algunos vecinos están echando mano de las cámaras de las parcelas y viviendas para comprobar el avance de las llamas, que se encuentran realmente cerca de las casas. Los vídeos vuelan y los rumores también, aunque es importante aclarar que, a las ocho de la tarde de este domingo, no se ha reportado ninguna vivienda incendiada en el pueblo. En la localidad es donde se centran ahora los principales esfuerzos de extinción.
Los desalojados están siendo atendidos por miembros de Cruz Roja de Benavente, solo cinco personas para un dispositivo tan amplio, a la espera de que lleguen refuerzos de Zamora. De momento, hay agua y poco más, y escasea por el calor. En las mesas conversan vecinos que viven de continuo en la zona con aquellos recién llegados para pasar parte de las vacaciones de verano. Todos esperan poder regresar a sus casas en las próximas horas, algo más seguro en el caso de Molezuelas de la Carballeda que en el resto.

Entre los desalojados hay personas mayores, algunas con necesidades de medicación que van trasladando a los responsables de Cruz Roja, personas impedidas, niños que pasan el rato como pueden e incluso bebés a los que sus padres intentan dar algo de agua para poder sobrellevar las altas temperaturas. Algunos vecinos han traído también a sus mascotas y hay personas que portan incluso grandes maletas. La información es poca, de momento, pues solo hay una pareja de la Guardia Civil para atender todo este panorama.