El portavoz del Gobierno de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha insistido en mirar al Ejecutivo nacional para que «escuche» a los vecinos de zonas como Sanabria y recupere las paradas de tren suprimidas a través de la reorganización planificada por Renfe, que se anunció en mayo y se ejecutó el pasado 9 de junio.
Ante la presión social, Carriedo ha advertido de que la Junta mantendrá las reclamaciones: «Seguiremos insistiendo donde sea necesario», ha indicado el portavoz, que no ha hecho mención siquiera a la posibilidad de financiar, desde la administración autonómica, un servicio Avant, como han sugerido los responsables del operador ferroviario.
En cambio, desde la Junta ponen el foco en Renfe y también en el ministro de Transportes, el vallisoletano Óscar Puente, que está de baja por paternidad, pero que «encuentra tiempo» para mandar mensajes vinculados a la actualidad a través de las redes sociales y que «podría encontrar un rato para solucionar estos problemas».
«Ahora que el presidente escucha exigencias por parte de sus socios, sería una buena ocasión para escuchar a la gente de Castilla y León y recuperar las paradas», ha remachado Carriedo.