Procedente de Leganés, concretamente del barrio de Zarzaquemada, Parquesvr es de esos grupos que no deja indiferente a nadie. Su rock alternativo, característico por tener temas donde la banda trata la actualidad política y social desde la sátira y la crítica, llega este viernes a La Cueva del Jazz. Su último disco, Si molesto os vais, refleja el espíritu de este conjunto con nombre de centro comercial. El vocalista, Javier Ferrara, sostiene que el germen de Parquesvr está en hacer lo que creen hacer bien, mientras en sus letras levantan ampollas y avivan conciencias.
– ¿Vuestra pasión por la música nace desde que sois niños?
– Mi pasión de pequeño era más el cine, pero la música es un arte que también he tenido muy presente. Siempre me ha gustado la música desde que tengo uso de razón. En el caso de las canciones, no pretendemos que sean reivindicativas, son más pura inconsciencia que algo premeditado. Entonces, creo que va más sujeto a nuestra forma de ser y de ver el mundo.
– Originarios de Leganés, del barrio de Zarzaquemada, un distrito que tiene impronta. Vuestro nombre hace referencia a su centro comercial, un lugar que, irónicamente, contrasta con la esencia misma de los barrios…
– Básicamente, sí. Lo que pretendíamos era arrebatarles el concepto. Parque Sur son dos uniones, o sea, son dos palabras que juntas reflejan lo que es el centro comercial, pero que para nosotros el parque siempre ha sido un sitio de unión. Por decirlo de algún modo, nos representa.
– ¿Qué significa ser «de barrio»?
– Ser «de barrio» es pertenecer a un espacio concreto y tener un sentimiento de pertenencia hacia un lugar con unas determinadas características. Es decir, en mi barrio, por ejemplo, tenemos una forma muy distinta de hablar, un acento distinto, unas palabras distintas, y una forma de desarrollarnos y de relacionarnos diferente a la que pueda tener la gente que sea del centro de Madrid.
– ¿Consideras que esa raíz, ese calado de barrio, os ha llevado un poco a ser lo que sois?
– Evidentemente. Tú eres de donde vienes y no puedes borrar lo que son tus orígenes. Tiene mucho que ver el sitio de donde provenimos con las canciones que hacemos y la forma de ser que tenemos. Hay mucho de Leganés en nuestro versos. De ahí canciones como Zarzaquemada. A mí me marcó mucho cuando estudié dirección de cine y no tenía mucha conciencia de que ser de barrio era tan determinante en la vida. Entonces, cuando entré a mi clase, a veces, me hacían preguntas sobre donde vivía, curiosidades del barrio… Hubo un profesor que me me dijo: “nunca olvides de donde eres porque los demás no lo van a olvidar”. Desde ese momento, siempre he hablado de donde soy.
– El estilo musical de Parquesvr no se encuadra dentro de un género comercial. De hecho, la sátira y la crítica social que abordáis en vuestras canciones os convierten en una banda diferente a otros grupos. ¿Qué te motiva a seguir este camino, en ocasiones, más complicado?
– No, no somos comerciales. Nos encantaría serlo y llenar estadios, vender millones de discos y vivir en mansiones. Pero bueno, al final hacemos lo que sabemos, lo que creemos que se nos da relativamente bien y lo que creemos que es bueno para nosotros, para nuestros estándares de calidad. Habrá quien diga que lo que hacemos es una absoluta basura, pero hacemos lo que podemos.
– La actualidad política y social siempre tienen cabida en vuestras canciones, que se ven protegidas bajo el paraguas de la sátira. ¿Qué papel juega el humor ácido en vuestras letras?
– Yo escribo un poco basándome en cómo vivo y en lo que percibo en mi vida. Entonces, la sátira es una forma recurrente que tengo de relacionarme con lo demás. Evadirla a la hora de escribir me parecería algo absurdo. No pretendemos constantemente hacer gracia a la gente. Sí creo que hay una impronta de intentar agitar, pero no de hacer reír. Al final, la forma que tenemos de ser nos lleva a que la gente se ría y, oye, bienvenidos sean.
– ¿Cómo seleccionas los temas de vuestras canciones? Sabemos que la actualidad nunca da tregua, ¿es algo que elige conscientemente, o, en ocasiones, se deja llevar por este torbellino de acontecimientos?
– En general, escogemos nosotros el tema de las canciones y no nos dejamos llevar por la actualidad. Sí que hay canciones como puede ser Por un puto pico, cuya temática estaba a la orden del día con el caso del beso de Rubiales a Jennifer Hermoso. Fuimos bastante ágiles, por decirlo de alguna forma. Pero hay otros en los que no nos apetece pegarnos tanto a la actualidad, como Juan Carlista o como Lance Armstrong. El ciclista dejó de ser noticia una década antes de la salida de nuestro tema.

– ¿Tener un mensaje tan claro y a veces ser tan directos con temas que agitan socialmente y que no son tratados en el panorama musical os ha causado alguna complicación en vuestra carrera?
– A ver, desencuentro a nivel personal no, pero, a nivel de grupo, sí. Somos conscientes que hay, en según qué instituciones, donde nosotros no podemos tocar. Por ejemplo, la Comunidad de Madrid no nos quiere programar y está en su legítimo derecho de no hacerlo.
– Una de las características más destacadas en vuestros singles es la crítica hacia la actualidad política, social y las personalidades involucradas. Nadie se libra. Por ejemplo, ahora que mencionas la Comunidad de Madrid, en la canción Que Arda Madrid se hace alusión a la gestión de Isabel Díaz Ayuso con las residencias. ¿Eres consciente de que, guste o no, vuestras canciones avivan las conversaciones de temas tabú?
– Sí, muy conscientes. En Que Arda Madrid nos metemos con Isabel Díaz Ayuso por su gestión de las residencias durante la pandemia y nos metemos también con Pablo Iglesias en la siguiente estrofa. O sea que creo que no tenemos un posicionamiento ahí claro con ningún partido político. Entonces sí, somos conscientes, y, en el caso de Isabel Díaz Ayuso, somos conscientes de que no le gusta que la mencionen en una canción. Pero bueno, es lo que hay.
– ¿Qué te lleva a decantarte por estos temas, frente a otros más convencionales dentro del ámbito musical?
– Pues te diría que el hastío. Creemos que el 90% de todas las canciones hablan de lo mismo. De que me han dejado, de que estoy hecho una mierda, de que te quiero mucho… Me parece genial que la gente muestre a través de las canciones sus sentimientos, porque también están para eso, pero creo que en todas no es necesario. Por eso nos gusta escribir sobre otros temas muy distintos. Al final, lo que nos condiciona como seres humanos y como ciudadanos es el amor, el desamor, el alquiler, la política, la muerte, el trabajo… son muchísimas cosas.
– En la canción Pero, una de las más aclamadas, hacéis alusiones a aquellas personas que tienen estos discursos de “no soy machista pero…, no soy racista pero…”. ¿Considera que esos “peros” están superados o que aún hay que seguir batallando contra ellos?
– Totalmente. A nosotros nos condiciona la izquierda ideológica, pero le damos tanto a izquierda como a derecha. Creo que hay muchos “peros” también desde la izquierda. La izquierda a nivel nacional ha perdido a la clase trabajadora y a la juventud por muchísimos motivos. Unos ajenos a ella, pero otros en los que se tendría que mirar y reflexionar. Hay un hecho concreto y es que los jóvenes de este país, en su gran mayoría, ahora son de derechas. Es algo que nunca creía que iba a suceder.
– Entre tema y tema de actualidad también hay cabida para el amor en este disco. ¿Lo pasas mejor cuando tienes que abrirte en canal y mostrar tus sentimientos o cuando hablas de realidades sociales?
– Mucho mejor hablar de cuestiones sociales, pero creo que llega más cuando hablas del amor o del desamor. Es algo bastante obvio, pero cuando estás un poquito peor, escribes un poquito mejor. Cuando tú hablas de algo que es de ti para afuera, pues no tienes que buscar dentro. Entonces al no tener que buscar dentro te resulta mucho más fácil, más divertido. Te puedes incluso equivocar. Cuando buscas dentro de ti existe ese componente de autocrítica que puedes llegar a hacer, pero según qué aspectos y según qué cuestiones pues te pueden costar un poquito más. Y en el amor, cuando estás hecho mierda, o te han dejado o te han destrozado el corazón, pues te cuesta. En esos momentos, cuando buscas dentro, lo que encuentras es mierda y es esa mierda lo que escribes.
– ¿Estás de acuerdo con la frase “el arte debe ser incómodo?
– Bueno, puede ser incómodo. Que deba serlo, no estoy de acuerdo. Me encanta que haya arte incómodo, está genial. Yo creo que incomodamos a gente, y me parece genial que nos incomodemos. Pero no es una pretensión el incomodar. Sí creo que mi mera presencia en según qué lugares puede incomodar sin apenas yo hablar por mis temas. El hecho de escribir canciones no hace más que reforzar mis planteamientos de la vida y mi forma de ver el mundo.
– Este viernes tocáis en la Cueva del Jazz en Zamora para presentar vuestro nuevo disco Si molesto, os vais. ¿Qué debe esperar el público?
– Lo vamos a dar todo. Creo que le va a sorprender mucho a la gente que no nos haya visto en directo, porque normalmente la gente se acerca a Parquesvr por la broma o por las letras satíricas. Luego se encuentra una banda realmente buena en directo. Entonces, quien no nos haya visto, creo que se va a sorprender.