Con un once de gala y con un tridente de escándalo arriba: Lope de Vega, Calderón de la Barca y Federico García Lorca. Buenas credenciales son las que esta temporada presenta el Teatro Principal de Zamora, un «teatro de Primera» que este sábado ha celebrado el ascenso (simbólico) de categoría con un pasacalles muy futbolero por el centro de la ciudad. Con una afición entregada, con los responsables del Teatro eufóricos por el ascenso y con los paseantes sorprendidos por la performance, el Teatro ha conseguido lo que buscaba: impacto. Esta tarde, en Zamora se hablaba de esto.
La celebración ha contado incluso con la recepción en el Ayuntamiento de Zamora por parte del alcalde la ciudad, muestra de implicación municipal con la nueva temporada en la bombonera, que se presentará en breve y que promete emociones fuertes, nuevas apuestas y la intención ya sabida desde que José María Esbec dirige el Principal: mantener a los espectadores de toda la vida y abrir el Principal a nuevos públicos.
La celebración (con bengalas, bufandas, camisetas y una gran bandera con el lema «Cómo no te voy a querer») es el pistoletazo de salida del Principal al 2025, un evento impregnado de la pasión del equipo de la bombonera y que ha pretendido llevar un mensaje «de arte, cultura y unión» a las calles de Zamora. Este año el Teatro Principal «aspira a ser un referente en el panorama teatral, con una programación diseñada para todos los públicos y con el objetivo de superar las expectativas de nuestra audiencia», aseguran sus responsables.
El liceo presentará próximamente la programación de la primera parte de la temporada, algo que «no sería posible sin el apoyo y la complicidad de un público que, año tras año, hace posible que la magia del teatro cobre vida».