Las queserías del futuro serán más eficientes y recorrerán el camino de la descarbonización junto con empresas de otros sectores. No se antoja una tarea sencilla en algunas de las grandes industrias, pero los expertos se muestran convencidos de que el camino que la industria ha iniciado afectará a todos los sectores de la economía. Así quedó de manifiesto en una de las mesas redondas que Iberdrola organizó en Zamora con motivo de la celebración de la segunda edición de la Feria Fromago, titulada con un nombre tan sugerente como «La Quesería del Futuro».
El responsable de dar las primeras pinceladas sobre el futuro energético del sector fue Xabier Antiza, responsable de descarbonización industrial de Iberdrola. «Descarbonizar el consumo eléctrico es más sencillo, pero descarbonizar el calor es mucho más complicado porque necesitamos temperatura. Dicho esto, no es imposible», apuntó Antiza ante su auditorio.
El responsable del área de Iberdrola puso sobre la mesa las tecnologías existentes, «muy útiles» para reducir las emisiones de las queserías”: bombas de calor o calderas eléctricas cumplen las funciones exigibles en este sentido, con el hándicap del consumo de las calderas de luz. «Lo que es muy útil en estos momentos es hacer una descarbonización parcial, que afecte a una parte de la producción y que mantenga la empresa en unos parámetros competitivos» porque, recuerdan desde Iberdrola, «la sostenibilidad tiene que ser medioambiental pero también económica» para los negocios. En zonas sur de España la energía solar «aporta además sostenibilidad y redunda en una industria más sostenible», reitera Antiza.
Así las cosas, la quesería del futuro será «un compendio entre el uso de la energía verde y la descarbonización» que encontrará soluciones más ambiciosas de las que ahora se ponen sobre la mesa. «Las pequeñas industrias podrán en breve tomar decisiones financieras que busquen la sostenibilidad sin ser menos competitivas económicamente», concluyó Antiza.
El camino a la descarbonización
Iberdrola asegura que «la transición a una economía neutra en carbono a 2050 es posible y tiene sentido económico». La descarbonización de la economía, «además, es una gran oportunidad para crear riqueza, generar empleo y mejorar la calidad del aire», apuntan desde la compañía. Por eso, el grupo se ha comprometido a abanderar la transición energética, un camino que emprendió hace ya 20 años y que le ha llevado a invertir 120.000 millones de euros desde entonces. «Además, mantendrá el esfuerzo inversor con más de 41.000 millones hasta 2026 para permanecer así a la cabeza de la revolución energética, lo que permitirá a la compañía superar los 100 GW de capacidad instalada, más del 80% renovable, al final de la década», indican fuentes de la empresa energética.
Por sus propias características, descarbonizar el sector eléctrico de una forma eficiente es primordial, al ser esta una fuente de energía en la que el hito puede lograrse «de manera inmediata y competitiva, gracias a la creciente integración de las energías renovables en su mix de generación». Se espera alcanzar en torno al 65 % de generación eléctrica renovable en 2030 y el 85 % en 2050, lo cual requiere ciertas actuaciones, asegura la empresa. Entre otras, el impulso a las renovables, incentivando los mecanismos competitivos; el desarrollo y digitalización de la infraestructura de red, con un marco regulatorio estable y predecible; el establecimiento de mecanismos de capacidad, que aseguren la firmeza y flexibilidad necesaria al sistema de forma sostenible y el fomento de almacenamiento eficiente, para facilitar la gestión de la alta penetración de las renovables.
Los lácteos en la alimentación
Una temática más “amable” tuvo la segunda de las dos mesas redondas organizadas por Iberdrola durante la segunda edición de Fromago. Fue, además, la mesa redonda que atrajo más atención de las que se celebraron durante los cuatro días que duró la feria. La ponencia «Beneficios de los lácteos para tu salud, el queso» trajo a Zamora a una de las más reconocibles embajadoras de Iberdrola, la campeona olímpica Lydia Valentín.
La atleta aprovechó su presencia en la capital para defender una dieta «basada en el sentido común» y abogó por el consumo de lácteos y quesos en las dietas equilibradas, también en las de los deportistas de alto rendimiento. «Los lácteos han sido siempre base de mi alimentación para ganar masa muscular, y estoy encantada de promover que la gente tenga consciencia de lo que significa tener una buena alimentación y un estilo de vida saludable», resumió Valentín.
Este reportaje es un contenido patrocinado por Iberdrola