Castilla y León rechaza la idea del Gobierno de transferir el MIR a las comunidades autónomas y plantea el «riesgo de ruptura del modelo actual» basado, argumenta la Junta, «en la equidad y cohesión nacional del sistema de formación de especialistas sanitarios».
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha asegurado que el Gobierno de Castilla y León seguirá de cerca este compromiso, después de que el ministro de Sanidad haya asegurado que continuará habiendo un MIR único. “Nos alegramos de las palabras del ministro, pero tienen que verse reflejadas en hechos, porque cualquier otra posibilidad sería discriminar a comunidades como Castilla y León”, ha asegurado Mañueco.
Desigualdades
Desde Castilla y León se comparte la idea de que ese traspaso competencial sería una medida generadora de desigualdades en la formación, provocando falta de cohesión en los estándares de calidad a nivel nacional y dificultades en la movilidad y homologación de profesionales. Por ello, la Junta de Castilla y León muestra su respaldo a un modelo que, a pesar de poder estar abierto a modificaciones y mejoras, ha demostrado ser exitoso en el Sistema Nacional de Salud y cuenta con reconocimiento internacional.
La Junta de Castilla y León considera que el sistema de formación sanitaria especializada debe seguir centralizado para garantizar la equidad, ya que otras opciones provocarían una asimetría sin precedentes en términos de acreditación de unidades, selección de plazas, programas de enseñanza, criterios de evaluación, remuneraciones, etc.