El Ayuntamiento de Morales del Vino está a la espera de un informe de la arquitecta municipal que permita conocer ya a ciencia cierta si hay deficiencias importantes en la piscina cubierta del centro deportivo Morales Sport, que pasó definitivamente a manos del Ayuntamiento del pueblo el pasado mes de junio. Un informe que se antoja clave para el futuro del complejo deportivo, pero en el que las perspectivas son buenas visto lo que ha sucedido en el resto del complejo deportivo, que recupera la vida en la jornada de este lunes después de llevar cerrado desde el mes de julio del año 2024.
Comenzarán a funcionar, como ya informó la semana pasada este periódico, las salas que formaban parte del gimnasio cuando estaba operativo (donde se llevaban a cabo las clases de spinning, entre otras disciplinas), que ya han sido debidamente revisadas, que están en condiciones y que acogerán las actividades lúdicas y deportivas que ahora se imparten tanto en el pabellón como en el salón municipal, espacios menos adecuados para ello.
La primera inspección llevada a cabo al edificio indica que la falta de mantenimiento en las instalaciones ha sido evidente en los últimos años de concesión. La decadencia, desde la pandemia, ha sido notoria, primero con el cierre de la piscina cubierta y después con la caída en desuso del resto de instalaciones. Con todo, no hay grandes problemas, las cubiertas (que era lo que más preocupaba) están bien y no hay defectos localizados a nivel de estructura.
El informe que está elaborando el Ayuntamiento es fundamental para empezar a trabajar en la piscina cubierta, que será la parte más costosa de volver a poner en funcionamiento aunque la intención del Ayuntamiento sigue siendo reabrir todo el complejo. Las pistas deportivas del exterior funcionan desde junio, la piscina de verano (que se enfrenta este invierno a una nueva reforma, ahora ya en profundidad) volvió a estar operativa en julio y con las clases en el complejo deportivo (que cambiará de nombre) recupera la actividad el recinto del gimnasio. No todavía como tal porque, como también informara este periódico la semana pasada, el Ayuntamiento espera que el juzgado le autorice a disponer de la fianza depositada por Primus Invictus (90.000 euros) para comprar las máquinas. La pista de minikarts se habilitará también, aunque es algo que no tiene fecha.
La actividad, así pues, se reanuda hoy. Zumba, judo, sevillanas, gimnasia de mantenimiento y yoga serán las primeras disciplinas y se impartirán en horarios de mañana y tarde. «Vamos a seguir trabajando, la gente nos lo demanda, estas instalaciones son necesarias para el pueblo y no pueden estar cerradas, pero todo lleva su tiempo», confirmaba la alcaldesa de Morales del Vino, Carmen Lorenzo.