La Diputación de Zamora ha aprobado este viernes, en el Pleno de septiembre, el expediente que desbloquea la nueva licitación del contrato para la gestión del Teatro Ramos Carrión. Tras un proceso «muy farragoso», la institución ha conseguido dar salida a un documento que fija las condiciones de lo que será el futuro próximo de esta instalación cultural ubicada en la ciudad, pero de responsabilidad y vocación provincial. En la práctica, esto servirá para que el área que dirige Víctor López de la Parte pueda implementar los cambios que, a su juicio, hacen falta para optimizar el funcionamiento del liceo.
El encargado de ofrecer los detalles sobre el nuevo pliego ha sido el propio vicepresidente primero de la institución, que ha recordado que la última prórroga del contrato anterior expiró en 2020, por lo que ya hace cinco años que estaba caducado. Ahora, la idea más optimista es que el teatro esté funcionando con la nueva gestión a partir del 1 de enero de 2026, aunque todas las partes asumen que puede haber complicaciones administrativas que causen nuevas demoras. Al menos, desde este viernes, el proceso está en marcha.
López de la Parte ha señalado, en su intervención, que el nuevo contrato saldrá por dos años más otros tres opcionales, y ha apuntado que los servicios técnicos de la Diputación han afinado los pliegos para que el canon anual que aportará la institución a la futura adjudicataria se quede ligeramente por debajo de la cantidad que percibe ahora la UTE que se mantiene al frente del Ramos: serán 721.000 euros al año: algo más de 3,6 millones si se agotan todos los plazos del contrato.
Además, el vicepresidente primero ha señalado que el nuevo pliego tratará de dar prioridad a «la calidad» por encima del volumen en la programación. «El teatro necesita más proyección», ha remarcado López de la Parte, que ha subrayado también que la empresa que tome las riendas se comprometerá a integrar al Ramos en la Red Española de Teatros: «Queremos que haya cultura zamorana y programación diversa; una gestión más completa», ha insistido el responsable político.
Además, la Diputación se reservará esta vez 60 días anuales de uso exclusivo de las instalaciones, en lugar de los 15 actuales; 150 en la sala de exposiciones; y 30 en las salas polivalentes y en la terraza. Conviene apuntar aquí que, en el caso de superar ese límite, la institución tendría que abonar el coste correspondiente a la utilización del liceo, aunque a un precio que se reduciría al 50% en comparación con lo que pagaría una empresa o institución ajena.
Colaboración con el Principal
Por otro lado, tras lanzar un dardo al Ayuntamiento «por marear» al inicio del mandato con la posibilidad de la gestión conjunta con el Teatro Principal, López de la Parte ha confirmado que se reservarán días para programar actuaciones del liceo municipal en las dependencias del Ramos Carrión, y ha anunciado igualmente que se sellará un compromiso para que la empresa adjudicataria abra, como mínimo, tres meses al año la cafetería del liceo provincial. «Se pedirá que haya promoción de los Alimentos de Zamora», ha advertido el político.
Además, la empresa estará obligada a contar con ocho trabajadores fijos, más los que incorpore a través de la bolsa de horas, y se someterá a una supervisión trimestral de la programación: «La idea es que todo esté más alineado con los intereses de la provincia y que el contrato suponga un salto cualitativo para que el Ramos Carrión se convierta en un motor cultural, turístico y social para Zamora», ha remachado López de la Parte.