«No ha cambiado nada». La frase de Javier Yáñez, el conductor de la autobomba Charlie 7 de la base de Villardeciervos, bien resume el espíritu de la protesta de este sábado en la plaza de La Marina. «El términos generales, todo está igual» que en el año 2022, aquel fatídico verano en el que ardieron más de 60.000 hectáreas en la provincia en dos grandes incendios concentrados en la Sierra de La Culebra. «Algunos», ha asegurado Yáñez preguntado por las supuestas mejoras en el operativo, «hemos tenido suerte y nos han ampliado el contrato unos meses. Otros siguen igual». Igual significa que están en casa buena parte del año porque el operativo reduce costes.
Los bomberos forestales han recogido este sábado las muestras de cariño de los asistentes a la concentración convocada por La Culebra No Se Calla. Unas quince personas que han acudido en representación de todos los trabajadores que durante el mes de agosto se han «desfondado» en apagar los muchos fuegos que se han declarado en Zamora. Un agosto en el que, aseguran los trabajadores, ha habido descoordinación. «Mucha, aunque entendemos que había muchos frentes, muchos kilómetros de llama y es difícil para los jefes de extinción poder coordinar todo». Las responsabilidades, aseguran, vienen de más arriba.
«Mientras la cosa siga así», con buena parte del operativo en casa durante los meses fríos, sin llevar a cabo trabajos de prevención y sin aprobar estrategias forestales, «en menos de tres años vamos a tener incendios como los de este año». La solución, a juicio de los bomberos, es invertir. «Hay que invertir más en prevención, y en ayudar a la gente de los pueblos a que se quede en los pueblos». A menos gente, peor estado del monte y mayor riesgo de incendio.

Los forestales piden apoyo de la gente, más en una provincia pequeña como Zamora, «donde es fundamental que todo el mundo se implique» para conseguir mejoras reales. «Somos una provincia pequeña, con gente viviendo en pueblos muy desperdigados, tenemos que apoyarnos todos para que esto cambie. Mientras no haya fuerza por parte de la gente no se va a conseguir nada. Ellos quieren su voto cada cuatro años y ya está», concluía el bombero.