Marcelino García Toral estrena este miércoles su nueva etapa como entrenador del Villarreal. Lo hace frente al Zamora CF, un rival que no le es ajeno, aunque haya pasado mucho tiempo desde la última vez que se vio las caras con el equipo rojiblanco. El precedente más próximo hay que buscarlo a primeros de los 2000, cuando los locales aún jugaban sus partidos en La Vaguada y el técnico apenas echaba andar en los banquillos; el más lejano pinta a un Marcelino jugador, allá por los 80. Entonces, el fútbol era todavía un mundo por descubrir para un chico de 19 años.
Para empezar en orden cronológico, el ahora entrenador del Villarreal se enfrentó dos veces al Zamora CF como jugador del filial del Sporting, entonces conocido como Sporting Atlético. La primera tuvo lugar en la temporada 1984-85 y deja en buen lugar a Marcelino. Su equipo ganó 3-0 a un rival dirigido entonces por Miguel Ángel Montes y en el que jugaban hombres como Felipe Miñambres, Coria o Vicente León. Además, el futuro técnico marcó el tercero de penalti.
La cosa se iba a torcer en la temporada siguiente para el, por aquellas, prometedor centrocampista asturiano. El 6 de octubre de 1985, el Sporting Atlético visitó al Zamora, cuyas riendas había tomado Raúl González, y se llevó un 4-2 de regreso. El partido, además, marchaba 1-1 cuando Marcelino fue expulsado en el minuto 40 de partido por el mítico colegiado Antonio Jesús López Nieto, que después hizo una carrera de más de 15 años en Primera.
Una campaña más tarde, Marcelino inició su periplo de cuatro temporadas en Primera División con el Sporting antes de recalar en el Racing de Santander, el Levante y el Elche para retirarse finalmente, antes de cumplir los 30, lastrado por las lesiones. Ya en los banquillos, el entrenador asturiano tuvo enfrente al Zamora CF en tres ocasiones con el filial sportinguista y probó todos los sabores: victoria, empate y derrota.
El balance como entrenador
En el primer duelo, disputado en Mareo en marzo del año 2001, el Zamora CF y el Sporting B peleaban por un puesto en el play off de ascenso a Segunda División y los visitantes lograron un punto valioso ante un rival que alineó aquel día como delantero centro a David Villa. Los hombres entrenados por Miguel Ángel Álvarez Tomé se adelantaron pronto con un gol de Simón, pero los de Marcelino equilibraron el encuentro en el segundo tiempo.
Al año siguiente, como en los 80, Marcelino y Coria volvieron a verse las caras, esta vez desde el área técnica. El zamorano salió vencedor en La Vaguada con un doblete de David Ávila (2-1), mientras que el asturiano tuvo más suerte en la segunda vuelta. El Sporting B ganó 3-2 e hizo inútiles los tantos de Diego Gómez y de Nacho Castro. Una de las figuras del choque en aquel 6 de abril de 2002 fue Granada, que más tarde defendería los colores del Zamora CF.
Como en el caso del Marcelino jugador, al año siguiente de enfrentarse a los rojiblancos, el destino del entrenador estaba en Primera División. La diferencia es que en los banquillos su carrera sí ha sido longeva. El ahora técnico del Villarreal pasa por ser uno de los preparadores con más prestigio del país, llegó a sonar con fuerza para la Selección Española y ahora ha recibido el encargo de impulsar un proyecto que no había encontrado el camino con Pacheta. Primera parada, el Ruta de la Plata.