Hoy han eclosionado dos de los tres huevos empollados durante las últimas semanas por Tromba, la hembra de halcón peregrino que anida en la azotea del edificio de los Nuevos Ministerios de Zamora. Tromba, la hembra que desbancó a Brisa como dueña del nido a comienzos de la primavera, ha puesto un total de tres huevos. Si todo marcha como debe, el tercer pollo nacerá en las próximas horas o días.

Ahora se repetirá el proceso que se vivió el año pasado con Viento (el halcón macho) y Brisa. La pareja criará a los pequeños halcones durante varias semanas hasta que, en el verano, puedan echar a volar por sus propios medios y se conviertan poco a poco en cazadores. Después, cuando tengan la suficiente autonomía, serán sus propios padres los que les expulsen del territorio para que no se conviertan en competidores.
El nido de halcones es un proyecto de NaturZamora en el que colaboran el Ayuntamiento de la capital, la Junta de Castilla y SEO BirdLife. El objetivo último es reducir la presencia de palomas en la capital, para lo cual los halcones se han confirmado como un arma muy efectiva. Según el recuento del año pasado, hay que recordar, los halcones peregrinos mataron más de trescientas palomas, lo que habla a las claras de su eficacia en este campo.