La construcción dentro de los límites de la Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica (en Otero de Sanabria concretamente) de uno «de los polígonos fotovoltaicos más grandes de España» provoca, indican desde Ecologistas Zamora, la «destrucción total» del paisaje de la zona. Un «despropósito», asegura el colectivo ecologista, «que es el de justificar la transición energética eliminando paisajes de enorme valor cultural y ecológico».
La información suministrada por Ecologistas Zamora habla de un parque «con varios recintos», todos ellos «comunicados por pistas kilométricas» para «fragmentar» los proyectos y que ninguno supere, de forma individual, los 50 Mw de potencia. De forma conjunta, «estaremos hablando de aproximadamente 200 Mw de potencia» que habría hecho obligatoria la intervención del Estado. Cuando se sume el parque «Valentina Solar», en Asturianos, la zona contará con sesenta megavatios extra, «un ataque brutal y sin precedentes al situarse en otro de los valles más valiosos» de la comarca.
«Estamos ante una obra faraónica en la que quedarían afectadas más de 300 hectáreas de una u otra manera, con la construcción no solo de las plantas sino de una nueva línea de alta tensión, una subestación y las consiguientes carreteras de acceso y “zonas de protección” de las instalaciones», apunta Ecologistas Zamora. Dentro de una zona habitada por especies protegidas -una de las mejores zonas loberas de Europa- y a escasos metros de áreas catalogadas de especial protección, LIC y ZEPA.
«Esta infraestructura se puede ver desde muchos kilómetros, desde todo el cinturón montañoso provincial, y genera un enorme impacto visual. Provoca, además, un efecto de fragmentación del hábitats para los vertebrados terrestres, acumulativo con las infraestructuras existentes, impidiendo el necesario tránsito de la fauna, factores denunciados por Ecologistas en su día y que la Junta ha despreciado», insisten las mismas fuentes.
«Vendidos al mejor postor»
«Resulta inadmisible que el ayuntamiento de Palacios de Sanabria, usando terrenos de uso comunal pertenecientes a Otero de Sanabria, haya vendido el patrimonio del municipio al mejor postor, privando a generaciones futuras de una riqueza medio ambiental incalculable», continúan. «Pero es aún más grave que el Servicio Territorial de la Junta de Castilla y León lo haya autorizado con tanta celeridad, atendiendo a unos criterios de utilidad pública que van en contra de los intereses de la provincia de Zamora y de la propia Comunidad castellano leonesa».
«No ha habido piedad», dice Ecologistas Zamora, con el pueblo de Otero de Sanabria, que se queda sin gran parte de su patrimonio cultural y paisajístico, «en una zona ya de por sí muy maltratada ya por un embalse, una carretera nacional, una autopista, una línea de alta velocidad y dos líneas de alta tensión más».
«Es absurdo destruir el medio ambiente con la excusa de construir un sistema eléctrico renovable que pueda luchar contra el cambio climático», razona el colectivo.
«Ecologistas Zamora no está en contra de la energía renovable, pero sí en contra de despropósitos que, supuestamente, se llevan a cabo sin escuchar a las partes afectadas, sin escuchar a los expertos en medio ambiente, sin dar cuentas a la UNESCO -que es la que gestiona el espacio simbólico de la Meseta Ibérica- y sin escuchar, desde luego, al propio paisaje y a la naturaleza», insisten las mismas fuentes.