Si Zamora no es una provincia que precisamente destaque por las oportunidades económicas de las que gozan sus ciudadanos, los jóvenes lo tienen especialmente crudo. De hecho, de entre las ciudades españolas de menos de ochenta mil habitantes, Zamora es la tercera en la que más jóvenes se encuentran cobrando por debajo del sesenta por ciento de la renta mediana. Casi el treinta por ciento de los jóvenes, el 27,9% concretamente, se halla en esta situación. Solo Segovia y Ávila, provincias cercanas en lo geográfico y también en lo económico, tienen una situación peor que Zamora.
Los datos muestran que la pandemia y la posterior crisis de la inflación han hecho estragos entre los trabajadores más jóvenes de la provincia. En 2019 el porcentaje de personas con ingresos por debajo del sesenta por ciento de la renta mediana se establecía en el veinte por ciento. Bastante, sí, pero muy lejos de los datos del año 2015, cuando superaba holgadamente el 32%. Es decir, en cuatro años se había avanzado mucho. Tanto como ahora se ha retrocedido.
Pero los datos van más allá e indican que el 19% del conjunto de los ciudadanos se encuentra viviendo con rentas por debajo de ese 60% de la mediana que marca el umbral de pobreza. Dos de cada diez, para llevarlo a cálculos más fáciles. Y aquí hay, de entre las ciudades de menos de 80.000 habitantes de todo el país, Zamora es la primera. En ninguna otra capital pequeña hay tanta desigualdad como hay en Zamora. El porcentaje sí es superior en ciudades más grandes pero, comparada con las de su tamaño, la capital zamorana sale muy mal parada.
Los datos salen del estudio «Distribución geográfica de la renta de los hogares en España: prosperidad, desigualdad y pobreza», elaborado por Carmen Herrero y Carlos Albert y al que ha podido acceder este periódico. Y da más datos, la mayoría malos o muy malos para la capital. Por ejemplo, que el ocho por ciento de los zamoranos se encuentra en una situación de pobreza severa, que es aquella que acontece cuando hay que sobrevivir con ingresos que están por debajo del cuarenta por ciento de la renta mediana. E incide, además, en que esta situación se hace más presente entre las mujeres que entre los hombres.
Los datos permiten comprobar que en Zamora hay más desigualdad que pobreza. Porque, cuando se echa mano de los datos relativos a pobreza pura y dura, la ciudad ya aparece superada por bastantes capitales en una peor situación. Zamora es la novena ciudad de las que tienen menos de 80.000 habitantes en el índice de pobreza relativa (la superan Teruel, Soria, Palencia, Huesca, Segovia, Ciudad Real, Cuenca y Ávila), y es séptima cuando se habla de pobreza absoluta (le superan las mismas salvo Ávila y Ciudad Real, que se encuentran aquí en mejor situación).
Oportunidades, en Zamora y en el resto de España
Y, como puede intuir cualquiera, Zamora tampoco destaca en el grupo de ciudades en las que hay más oportunidades de renta. De hecho, también se sitúa a la cola de las de su grupo en este particular. En cuanto a los resultados por delimitación provincial, Guipúzcoa, Vizcaya, Madrid y Barcelona son las que presentan más oportunidades de renta, mientras que Almería, Badajoz y Alicante son las menos prósperas.
En el análisis provincial de la desigualdad, destaca el nivel elevado de Madrid, donde los ingresos del 20% de la población más rica triplican a los de los ciudadanos situados en la franja del 20% más pobre Todas las provincias mediterráneas, excepto Castellón y Valencia, se encuentran entre las que presentan índices altos de desigualdad, así como las provincias canarias y Navarra. Por el contrario, Palencia y Soria aparecen como las más igualitarias.
Por último, los mayores datos de pobreza relativa se observan en las provincias de Almería (31,4%), seguida de Alicante, Granada, Cádiz, Granada y Badajoz. En cuanto a la pobreza extrema o riesgo de exclusión, también afecta especialmente a las provincias del sur, concretamente a Almería, Granada, Alicante y Málaga, con más de un 13% de su población en riesgo de exclusión.
Respecto al grupo de ciudades entre 300.000 y 500.000 habitantes, Bilbao destaca claramente en oportunidades de renta sobre las demás y cierra el grupo Alicante, que también es la provincia más desigual. Por su parte, San Sebastián ocupa la primera posición en prosperidad entre las capitales de 150.000 a 300.000 habitantes, en contraste con Almería, Badajoz o Santa Cruz de Tenerife. Las más desiguales en este grupo son Granada y Santa Cruz de Tenerife.
Entre las capitales de 80.000 a 150.000 habitantes, Toledo es la que tiene mejores oportunidades de renta, mientras que Huelva obtiene los peores resultados. Girona y Tarragona son las capitales con mayor índice de desigualdad. Por último, en las capitales más pequeñas, las mejores oportunidades se dan en Teruel y las menores en Zamora. Teruel es también la más igualitaria y Ciudad Real la más desigual.