Era un secreto a voces y este jueves se ha confirmado: la Junta de Castilla y León tendrá que volver a licitar la obra del conservatorio de Zamora. Los trabajos llevan meses parados y la empresa Geoxa General de Construcciones no cumplirá el contrato, así que la única salida para la administración autonómica es reiniciar este proceso con el coste que esa circunstancia implica. Y no solo en dinero, también en tiempo. La expectativa era que las instalaciones pudieran estar listas de cara al curso que viene, pero ese escenario ya no es realista.
El encargado de confirmar la futura nueva licitación ha sido el portavoz del Ejecutivo de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, que ha hablado sobre este asunto en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno y que ha señalado que el proceso que se abre ahora es el mismo que se ha llevado a cabo con las obras del conservatorio de León, que se vio un tiempo atrás en la misma tesitura.
De este modo, a la Junta le tocará ahora finiquitar la relación con la empresa que abandona la obra, definir cuál era la parte que se había ejecutado (en torno a un 25%), valorar lo que queda por hacer, cuantificar su coste y volver a licitar. Todo ello llevará aparejados unos plazos extra para un proyecto que se adjudicó en su día por 14,8 millones de euros.
La consejera de Educación, Rocío Lucas, ya había dejado claro hace poco más de un mes que la Junta mantenía el compromiso con unas instalaciones que se están levantando en lo que era el agujero del palacio de congresos, en la calle Jiménez de Quesada. Los trabajos arrancaron en 2022, pero «las dificultades de la empresa» han dibujado este nuevo escenario que complica la posibilidad de hablar de fechas.