La jornada de gratuidad en los aparcamientos subterráneos de Zamora se saldó este domingo con bronca por un problema de comunicación que derivó en pagos inesperados para las personas que sacaron el coche de los parkings después de las diez de la noche. Las quejas de algunos de esos clientes han revelado una circunstancia que tiene su origen en el decreto firmado para permitir este estacionamiento gratuito en unas plazas que habitualmente son de pago.
Conviene recordar que esta medida de la gratuidad se aplica habitualmente en el marco del programa de la Semana de la Movilidad. En esta ocasión, se determinó que el domingo 22 de septiembre sería la jornada en la que no habría que pagar en los aparcamientos subterráneos, y así se publicitó a través de los canales del Ayuntamiento de Zamora y de los medios de comunicación.
Sin embargo, en el citado decreto, se matizaba que el horario de gratuidad sería desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche, un detalle del que no se informó públicamente en ningún caso y que la mayoría de los clientes desconocía. Esa circunstancia provocó que los usuarios que acudieron a retirar su coche más allá de esa hora se encontraran con la obligación de abonar la tasa correspondiente.
Y no solo eso. El sistema de cobro les exigía, además, pagar por toda la jornada de estacionamiento al haber finalizado ya el plazo de gratuidad, un hecho que soliviantó especialmente a los afectados, según narra una de las personas que ha contado su experiencia nocturna en el parking de San Martín, Santiago Fincias. Este hombre ha remitido una información a los medios a este respecto y ha anunciado que presentará también un escrito ante el Ayuntamiento para elevar su queja.
En la nota, Fincias aclara que la situación generó problemas también para la trabajadora del parking, que tuvo que abundar en las explicaciones y afrontar un problema que se escapaba de su mano. Al final, para retirar los coches, los usuarios del parking que salieron más allá de las diez de la noche tuvieron que pagar por toda la jornada. En el caso del citado cliente que ha dado su testimonio, más de siete euros por una estancia de unas ocho horas. Algo similar les sucedió a dos de los amigos que le acompañaban.
Error de comunicación
Desde el Ayuntamiento de Zamora, el concejal de Movilidad, Pablo Novo, ha admitido el error de comunicación entre los servicios municipales y ha lamentado los perjuicios que haya podido suponer este hecho para las personas afectadas. Además, ha confirmado que los perjudicados pueden acudir al parking para reclamar la devolución de las cantidades abonadas por el estacionamiento previo a las diez de la noche. En el caso de que no se les solucione allí el problema, los clientes tendrán que ir al cuartel de la Policía Municipal, en el Ayuntamiento viejo.
Esta solución no termina de convencer a Santiago Fincias, que aspira a recuperar el 100% del dinero. El afectado entiende que la ausencia de publicidad o la publicidad errónea sobre la gratuidad del domingo 22 de septiembre en los parkings es suficiente motivo como para que el Ayuntamiento asuma todo el coste del tícket, y así lo reclamará por los cauces correspondientes.