El Ayuntamiento de Toro y la Diputación de Zamora mantendrán en próximas fechas una reunión con la empresa de autobuses Monbus para tratar la reducción de frecuencias para viajar a Madrid. Un empeoramiento del servicio que los toresanos sufren desde que la nueva adjudicataria del servicio comenzara a prestarlo, el pasado sábado. «Estamos ya en contacto con personas de Monbus y cerraremos una reunión para intentar que la empresa tenga sensibilidad con Toro», apunta Javier Faúndez, que llama a «no ponernos nerviosos» y a «intentar resolver los problemas hablando» antes de «pasar al plan B».
La situación de las conexiones por carretera de Toro con Madrid ha ido a peor desde que llegó la pandemia. Antes, Toro contaba con ocho autobuses que cubrían todos los horarios tanto en sentido de ida como de vuelta. «Ahora se tienen que conformar con tres servicios de lunes a jueves, cuatro los viernes y domingos y dos los sábados». Esto supone coger el bus, como muy pronto, a las 10.55 horas, haciendo imposible llegar a Madrid a primera hora. Además, hay muchas más paradas entre medias.
El de Toro es un ejemplo de la mala «transición» que han protagonizado Avanza Bus y Monbus a la hora de cambiar la adjudicataria del servicio. Los usuarios se quejan, además, de la escasa formación que han recibido los conductores. Uno de ellos, relata una usuaria a este periódico, «no sabía encontrar la parada de Medina del Campo y estuvo media hora dando vueltas por el pueblo para acabar parando donde no era», lo que retrasó además la llegada a destino.
Críticas al Ministerio de Transportes
Desde Ahora Decide, partido que denunció la situación en la que quedaba Toro, aseguran que «el actual Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible parece que olvida sus compromisos en la lucha contra la despoblación y con vertebrar el territorio de manera que todos los ciudadanos, vivan donde vivan, tengan el derecho a una comunicación rápida con las poblaciones donde se concentran los servicios». Así, ligan la situación que se vive en Zamora con el caso de la estación del AVE de Sanabria. «Son ejemplos claros de que no se piensa en estos dos principios básicos del quehacer político y dan la impresión que sólo Madrid es importante», apuntan.