Zamora contará con un nuevo centro de interpretación de su paisaje cultural y del río Duero. El espacio podrá inaugurarse una vez se ejecute la restauración de una vivienda tradicional ubicada en el Camino Pastelero, una obra cuyo proyecto básico se ha aprobado este martes en la Junta de Gobierno Local y que contará con un presupuesto de licitación de 449.944,49 euros.
El proyecto forma parte de las actuaciones que se llevarán a cabo en el marco del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino «Corredor ecoturístico Zamora y el Duero», aprobado en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España y cuya ejecución corresponde a la Diputación de Zamora, mientras que el Ayuntamiento ha sido el encargado de contratar los servicios de redacción del proyecto, según marca el convenio.
La edificación objeto de restauración responde a la tipología de vivienda tradicional con almacenes agrícolas, vinculada directamente a las tierras de labor y a las estructuras auxiliares para su explotación. «Su estado actual es de total abandono y progresivo deterioro», han advertido desde el Ayuntamiento.
Con la restauración se busca impedir la desaparición de una edificación tradicional que es ya «un escaso ejemplo de la Zamora agrícola que ocupó este espacio histórico de la ciudad», a la vez que se pretende destinar el edificio rehabilitado al uso de Centro de Interpretación del Paisaje Cultural de Zamora y El Duero.
Las estancias previstas
El uso del edificio incluirá dos zonas de exposiciones, un distribuidor para aseos, un aseo normal, un aseo adaptado para personas con movilidad reducida, un almacén y una zona de instalaciones exterior. Asimismo, se proyecta una zona de acceso y terraza exterior con una plataforma horizontal con escaleras y rampas accesibles desde el Camino Pastelero. El conjunto se rematará con un vallado perimetral y con tres plazas de aparcamiento exteriores.
Para la correcta integración paisajística se ha previsto, además, la recuperación de las estructuras auxiliares vinculadas al agua, tales como un pozo, una alberca, una noria y una torre para el transformador del motor de riego.
En la medida de lo posible, la intervención persigue recuperar las estructuras existentes. Para ello se emplearán sistemas constructivos tradicionales, como las fábricas de mampostería, los entramados de madera o la teja cerámica, y se emplearán para los nuevos elementos portantes materiales modernos.