El sector público gana fuerza en Zamora y se convierte, ya con mucha diferencia, en el principal generador de empleo en la provincia. Los datos muestran que Zamora es una de las provincias del país con mayor presencia de trabajadores públicos entre el total de personas empleadas, y más del veinte por ciento de los trabajadores realiza su función para las administraciones. Un porcentaje que va al alza, como va al alza la cifra total de funcionarios y personal laboral.
Los datos los pone sobre la mesa el Boletín de Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, y son elocuentes. En Zamora hay ahora seiscientas personas más trabajando para las administraciones de las que había hace un año. Entre ayuntamientos, mancomunidades, Diputación, Junta y Estado dan sustento en la provincia a 11.362 personas.
Como administración con más competencias, es la Junta de Castilla y León la principal empleadora de la provincia. La Junta (encargada de contratar, por ejemplo, a los profesionales de la Educación y la Sanidad) paga en la provincia de Zamora más de siete mil nóminas. La administración local, donde se incluyen ayuntamientos y Diputación, da empleo a algo más de 2.600 personas. La administración estatal, por último, paga algo más de 1.600 nóminas en la provincia.
Dependencia generalizada del sector público
Los datos muestran que la economía de la provincia de Zamora depende, quizás en exceso, del sector público. A los más de once mil funcionarios o personal que trabaja para las administraciones habría que sumar los 47.615 pensionistas que hay en Zamora, la mayor parte de ellos (alrededor de 31.000) jubilados. Y, además, hay que contar a los más de 5.300 desempleados que perciben algún tipo de prestación.
Los datos son elocuentes. En Zamora, más de sesenta mil personas tienen como principal fuente de ingresos el erario público, ya sean trabajadores, pensionistas o desempleados con derecho a prestación. Una proporción que va más allá de una de cada tres personas. El envejecimiento y la elevada dependencia de las administraciones como generadoras de empleo hacen, en suma, que la provincia sea una de las más dependientes de las administraciones.