El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha reiterado el carácter «sólido y estable» del Gobierno de la comunidad en el acto de toma de posesión de los nuevos consejeros y de formalización del ascenso de Isabel Blanco al cargo de vicepresidenta. El líder regional ha reclamado a los miembros de su Ejecutivo, ahora monocolor del Partido Popular tras la salida de Vox, que se centren en «gestionar con eficacia» para «mejorar la calidad de vida» de las personas del territorio.
En esa línea, Mañueco ha tenido unas palabras especiales para quienes adquirían nuevas responsabilidades dentro del organigrama, como la citada Isabel Blanco. La zamorana mantiene la consejería vinculada a los servicios sociales, pero además incorpora ahora el cargo de vicepresidenta: «La igualdad es una bandera de este Gobierno», le ha recordado el presidente de la Junta a la zamorana, al tiempo que le ha demandado «la misma eficacia» como número dos del Ejecutivo que en su tarea anterior.
En lo tocante a Leticia García, Mañueco ha explicado que la ya ex delegada territorial de la Junta en Zamora tiene ahora la responsabilidad de «asegurar la pujanza» del sector económico de Castilla y León, dentro de la «obsesión» por generar empleo sin perder de vista la defensa de los trabajadores. Aquí, el presidente autonómico ha sido claro a la hora de subrayar uno de los pilares que ha de reconstruir la nueva consejera de Industria, Comercio y Empleo: «Hay que proteger el diálogo social».
Conviene señalar aquí que, en la etapa de Mariano Veganzones al frente del área, este asunto había generado una gran polémica, tanto por la retirada de determinadas atribuciones a los sindicatos como por la intención del responsable de Vox de acabar con recursos como el Serla, muy valorado desde la parte de los trabajadores como elemento útil en la mediación con la patronal.
Más allá de esto, Mañueco ha incidido en que todo su Gobierno ha de hacer «el máximo esfuerzo» para serle útil «a las personas, a las familias, a los trabajadores y a los empresarios de esta tierra», con el fin de que este sea un lugar «de oportunidades y de futuro».
«Vamos a actuar con lealtad a España y solidaridad territorial. También tendiendo la mano al resto de las administraciones, pero siendo exigentes en la defensa de los intereses de Castilla y León», ha concluido el presidente de la Junta.