La Diputación de Zamora declina intervenir para paliar parte de los daños sufridos por un agricultor de San Cristóbal de Aliste, que “no tenía seguro” según el presidente provincial y que ha perdido buena parte de su producción por la granizada sucedida en la tarde del pasado 26 de junio. “Tenemos que mandar un mensaje claro, y es que cuando uno vive únicamente de la agricultura, hay que tener seguros” que cubran situaciones de este tipo.
Faúndez asegura que si la Diputación interviene en este caso en concreto “estamos lanzando el mensaje de que no pasa nada por no asegurar” los trabajos “porque después viene la Diputación y lo paga”. Un mensaje “peligroso” porque “cada uno debe ser responsable de sus cosas”, argumenta el presidente provincial. “Tenemos mucha sensibilidad con estos temas, pero todos somos responsables de lo nuestro. Los agricultores, de su forma de vida y nosotros, de la gestión de las instituciones”.
El presidente apunta, por lo demás, que la institución provincial “se ha puesto a disposición del Ayuntamiento de San Vitero” para ayudar en la gestión de los daños que se han podido producir en el pueblo, como “en su día se hizo en Cerecinos de Campos, cuando se ayudó al Ayuntamiento” con el envío de maquinaria y personal y donde un ganadero perdió a los 10.000 pollos que componían su explotación. Se trabajó, insisten las mismas fuentes, en las cuestiones públicas, no en las privadas.
Faúndez ha realizado estas declaraciones para contestar a la moción sobre el tema que ha presentado en el Pleno el diputado de Zamora Sí Eloy Tomé, que ha pedido que la Diputación “haga de enlace” entre los afectados y las instancias superiores y que “defienda a los agricultores” como, asegura Tomé, “se ha hecho en otras ocasiones”.