Después de varios días asomándose a la cornisa, el pasado viernes Madrigal, una de las crías de la pareja de halcones que ha anidado en el edificio de los Nuevos Ministerios de Zamora, se lanzó a volar por la zona. Un momento importantísimo en la vida de las aves que indica que su desarrollo es satisfactorio y que las cosas avanzan conforme era previsible.
El momento, como casi todos en el día a día de la familia de halcones, fue captado por la cámara de Alfonso Rodrigo, uno de los impulsores de la iniciativa que ha conseguido que dos halcones peregrinos aniden y se reproduzcan en Zamora. Madrigal dio el viernes un par de vueltas al edificio y paró a descansar en la ventana de un octavo piso. Tras recuperar durante un rato del tremendo esfuerzo que suponen estos primeros vuelos, remontó después del vuelo para retornar a la azotea.
Los pequeños halcones, que nacieron posiblemente a finales del mes de abril, son de esta manera cada vez más independientes. Según el propio Alfonso Rodrigo explicó en declaraciones a este diario, durante las próximas semanas las aves son todavía dependientes de sus padres, Viento y Brisa, que serán los encargados de llevar el alimento al nido. Cuando hayan perfeccionado sus habilidades de vuelo y sepan cazar por sí mismos, algo que sucederá a lo largo del verano, serán sus propios padres los que les expulsen del nido al convertirse en competidores.
Durante los últimos días las visitas a la azotea han estado restringidas al máximo. Los halcones, que estaban hasta ahora en una fase muy incipiente de su desarrollo, han pasado por momentos críticos en los que la presencia humana podría haber motivado que se lanzaran a volar sin estar preparados.
La presencia de la familia de peregrinos en los Nuevos Ministerios forma parte de un proyecto capitaneado por SEO Salamanca y por el Ayuntamiento de Zamora, que cuenta con la colaboración de la Junta de Castilla y León, y que trata de implementar en la ciudad a una pareja de halcones para reducir el número de palomas. En el parque de León Felipe, el entorno más cercano al edificio de la Junta, ya puede apreciarse que la presencia de palomas ha caído de forma sensible, como disminuyó en la zona de la Catedral cuando Brisa, la hembra de halcón, pasaba allí sus días.
El proyecto pinta bien y el año que viene, si Brisa y Viento deciden quedarse con el nido y volver a procrear (lo que debería suceder, ya que los halcones mantienen los nidos), SEO Salamanca instalará una cámara en la azotea, lo que convertiría a esta familia en la primera de España con un nido con imagen y uno de los dos padres (Brisa) monitorizado por GPS. Para el futuro queda la instalación de un posible segundo nido. Zamora, asegura Alfonso Rodrigo, tiene población suficiente de palomas para dar alimento de sobra a dos parejas de halcones.