Los bomberos de la provincia de Zamora, los que atienden a todos los municipios con excepción de la capital, empezarán a cobrar unas tasas por intervención a los vecinos de los pueblos cuyos ayuntamientos no estén consorciados. Es decir, a los habitantes de las localidades cuyos consistorios no pagan los dos euros por habitante y año que demanda el servicio para poder financiar sus actuaciones.
Así lo ha anunciado este jueves el presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, que ha subrayado su intención de intervenir en este asunto para cambiar una realidad en la que, en estos momentos, el servicio se presta de manera gratuita en todos los pueblos independientemente de si el municipio de turno paga o no.
Con el cambio, a partir del mes de abril, si un vecino de estos ayuntamientos no consorciados llama a los bomberos para pedir que se retire un nido de avispa o para resolver un atasco en una tubería tendrá que pagar unas tasas que, «con una sola intervención», prácticamente cubrirían la cantidad total que se le pide a los municipios anualmente, según Faúndez. El presidente ha puesto como ejemplo el caso de Trabazos, donde ejerce como alcalde. Allí, el pago asciende a 1.710 euros al año por los 855 habitantes censados.
«No se puede tener el mismo trato hacia el que paga que hacia el que no», ha constatado Faúndez, que ha explicado que las tasas ya se contemplaban en el reglamento, pero que nunca se habían pasado. «Vamos a darnos un plazo de un mes hasta abril y empezaremos», ha recalcado el presidente provincial, que ha admitido que este será un proceso «transitorio» hasta la anunciada eliminación del consorcio. A partir de ese momento, que se podría demorar aún más de un año, las reglas volverían a cambiar.
En estos momentos, hay 199 ayuntamientos consorciados, por los que existen otros 47 que siguen fuera de este sistema de pago. El anuncio de Faúndez trata, de este modo, de estimular a quienes no abonan la cantidad anual para que se impliquen, en aras de no penalizar a sus vecinos.
Otros asuntos
Más allá de este asunto, la reunión de los órganos de funcionamiento del consorcio ha servido para aprobar el nuevo convenio con el Ayuntamiento de Benavente, que pasa a recibir 400.000 euros anuales para atender al municipio principal de la zona y a otros 70 ayuntamientos. En total, se trata de una labor que afecta a más de 36.000 habitantes.
De igual modo, el consorcio ha aprobado la incorporación de casi 1,3 millones de euros procedentes del remanente para adquirir cámaras de visión térmica y, sobre todo, para comprar dos autobombas pesadas, una para Rionegro y otra para Benavente, y dos vehículos de trabajo en altura. Estos últimos alcanzan los 22 metros operativos y cuestan 255.000 euros por unidad: «Uno irá para Zamora y otro a Bermillo o San Vitero», ha aclarado Faúndez.