Las antiguas escuelas de Tábara se convertirán próximamente en un espacio polivalente para el pueblo, merced a la rehabilitación acometida en el marco del Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (Pirep). Esta es una de las herramientas puestas a disposición de los municipios a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España y, en Zamora, beneficiará a otros tres ayuntamientos además del ya citado.
En este contexto, el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, ha visitado este martes las obras del municipio tabarés, que se encuentran en «su fase final».
«Hoy aquí comprobamos cómo el Plan de Recuperación del Gobierno llega a Zamora, impulsando la rehabilitación de edificios públicos y la transición energética, gracias a la colaboración institucional, en este caso entre el Gobierno y el Ayuntamiento de Tábara», ha valorado Blanco, que ha recordado que el Pirep también ha beneficiado al Ayuntamiento de Benavente, con 2.414.915,87 euros para rehabilitar el edificio de la calle Herreros, 45; al de Manzanal de Arriba, con 106.301,55 euros para obras de adecuación; y a Palacios de Sanabria, con 180.501,73 euros para la adecuación de un edificio municipal sin uso como albergue de los Caminos de Santiago.
«Todas estas obras tienen que estar recibidas sin reparos antes del 30 de septiembre de este año», ha recordado el subdelegado, que ha advertido de que resulta preciso cumplir con este plazo y que ha indicado que las ayudas han sido ya anticipadas por parte del Ministerio de Transportes a los ayuntamientos.
En el caso de la rehabilitación que lleva a cabo el Ayuntamiento de Tábara, los trabajos tienen un plazo de ejecución de tres meses y se hallan en su fase final. Las actuaciones incluyen la mejora del aislamiento y de la accesibilidad del inmueble, que se destinará a la realización de actividades culturales y sociales.
El subdelegado ha destacado también que el programa Pirep «da un impulso a la transición energética, ya que los proyectos financiados reducen un 30% o más el consumo energético de los edificios públicos, con el consiguiente ahorro». «Las obras cumplen además criterios de sostenibilidad, inclusión y calidad estética», ha zanjado Blanco.