El Procurador del Común considera que la Junta de Castilla y León debe valorar la posibilidad de habilitar «una línea específica de ayudas» para fomentar el pastoreo como arma contra los incendios forestales que golpean cada verano a la comunidad. En una resolución publicada el pasado 22 de diciembre, la institución propia señala que el aprovechamiento ganadero extensivo es una forma de control de la vegetación natural que puede servir «para prevenir tanto la aparición como la virulencia» de los fuegos.
En el texto, el Procurador del Común remarca que esta idea parte de una actuación de oficio de la institución propia de la comunidad, en aras de conocer si la administración autonómica había desarrollado alguna iniciativa para fomentar el pastoreo de ganado extensivo en los montes y terrenos forestales. El asunto cobró interés a raíz de un verano particularmente dañino desde el punto de vista de los incendios, sobre todo en provincias como León y Zamora.
Tras analizar la documentación remitida, el Procurador comprobó que, desde la Junta, se habían adoptado medidas para fomentar la regeneración de pastos en los montes de utilidad pública, pero insistió en la pertinencia de habilitar esa línea específica para el pastoreo. Y puso como ejemplo lo que sucede en otras comunidades autónomas.
Por ejemplo, en Castilla-La Mancha, se aprobó en el año 2024 la convocatoria de las ayudas para el
mantenimiento de la Red de Áreas de Defensa (RAD) contra incendios forestales mediante pastoreo controlado. «Estas ayudas tienen como finalidad principal fomentar el pastoreo mediante el uso del ganado controlado en zonas estratégicas ligadas a la prevención de fuegos, con el objeto de reducir el riesgo potencial de incendios forestales y contribuir a la conservación y estabilidad de los montes y sistemas agroforestales».
También en la Comunidad de Madrid se prevé continuar con la aplicación del Programa de Pastoreo Preventivo implantado desde el año 2011. Merced a ese plan, se fomenta el pastoreo en una superficie total de 4.140,65 hectáreas, de las que 3.474,54 corresponden a pastoreo habitual mediante la creación de fajas lineales de anclaje, y 666,11, a pastoreo en mosaico.
Por otro lado, en Extremadura, desde 2012, se establecen las condiciones para desarrollar, como medio de prevención de incendios forestales y eliminación de la vegetación, determinadas actividades de pastoreo ovino en las superficies acogidas a las ayudas a la forestación de tierras agrícolas. También en la Comunidad Valenciana se destina dinero público a respaldar esta actividad.
Un principio clave
En conclusión, la Procuraduría pretende que la Junta de Castilla y León adopte medidas en esa línea, como por otra parte ya hizo con el ganado caprino en la sierra salmantina. «Entendemos, además, que así se contribuiría a cumplir uno de los principios rectores de las políticas públicas: promover la garantía efectiva del derecho de todos los castellanos y leoneses a vivir en un medio ambiente ecológicamente equilibrado y saludable, impulsando la compatibilidad entre la actividad económica y la calidad ambiental con el fin de contribuir a un desarrollo sostenible», zanjan desde la institución propia de la comunidad.
