Los bomberos anuncian movilizaciones, protestas públicas e incluso acciones judiciales en respuesta, aseguran, al «inmovilismo» del Ayuntamiento de Zamora en la negociación de sus condiciones laborales, que sigue sin aclararse después de varios meses de conversaciones. Este lunes se produjo una tensa reunión entre los representantes de los bomberos y la concejala de Personal del Ayuntamiento de Zamora, Laura Rivera, que finalizó sin acuerdo y que ha motivado una nueva denuncia pública de los profesionales de extinción de incendios.
Por lo que refiere a las reivindicaciones que se hacen desde el Cuerpo de Bomberos, no hay grandes novedades con respecto a lo ya conocido. Sí se ha revelado recientemente una sentencia que obliga al Ayuntamiento a desglosar en la nómina los conceptos de las retribuciones de forma más detallada, una cuestión que con todo no afecta a lo principal del conflicto. La cuestión radica, fundamentalmente, en el precio de las horas de refuerzo de guardia. Los bomberos de Zamora trabajan 62 días al año en turnos de 24 horas y, a mayores, acuden a su puesto de trabajo cuando se decreta que son necesarios sus servicios, algo que pasa más habitualmente de lo que todas las partes desearían. A mayores de esos 62 días los efectivos acuden a trabajar, según ha explicado Miguel Ángel Jurado, cabo, entre 40 y 42 días a mayores cada año. Una cifra exagerada según Laura Rivera y que, de ser ciertos los datos que dan los bomberos, hablaría de una presencia «extra» en el puesto de trabajo de alrededor de mil horas anuales.
Horas que los bomberos cobran a mayores de su sueldo pero no a tanto como les gustaría. Según los efectivos del cuerpo, se cobran «a menos que una hora ordinaria», algo que desmiente el Ayuntamiento, que dice que se cobran a lo mismo. Sea como fuere, aquí hay un importante foco de conflicto. Los bomberos quieren cobrarlas más caras y el Ayuntamiento ha llegado a ofrecer, según la información dada a este periódico por Laura Rivera, que estas horas se cobren a un 30% más con respecto a las ordinarias, algo que ha sido rechazado por los bomberos, que quieren más. Actualmente, cada guardia de 24 horas supone para los efectivos del cuerpo un ingreso de unos 500 euros a mayores de su nómina ordinaria. «Ellos pretenden cobrarlas a más de mil euros porque quieren que se les aplique el mismo criterio que a la Policía Municipal. Pero los turnos de la Policía Municipal son de menos horas, así que no podemos asumir» la reivindicación de los bomberos, resume Rivera.
Los efectivos del cuerpo mantienen de cara a 2026 las medidas de presión, consistentes en el plano interno en no apuntarse voluntarios para realizar estos refuerzos de guardia, que tienen que realizar por decreto. «Llevamos así siete meses. Nos obligan a venir a trabajar y no pagan la hora como hay que pagarla. Cobramos la hora de refuerzo a menos de la hora ordinaria», ha apuntado Jurado, portavoz hoy de los bomberos. «Si no se apuntan voluntarios, debemos decretar. Todos los funcionarios tienen una obligación de servicio público y tienen que estar en su puesto de trabajo cuando son necesarios», apostilla Rivera.
Esta es la principal cuestión, aunque hay algunas más. Los bomberos insisten en que serían necesarios más efectivos para tener un turno de trabajo acorde con las necesidades de Zamora, algo que el Ayuntamiento también está comprometido a estudiar. «Si son necesarios más bomberos, y si el Estado nos deja contratar, contrataremos. Pero eso conllevará que habrá menos refuerzos de guardia y menos horas extraordinarias» en la plantilla existente y, por tanto, menos dinero.
En las otras reivindicaciones sí que se han producido avances, siempre según el Ayuntamiento, porque los bomberos pintan un panorama en el que las conversaciones están atascadas. Así, de nuevo según Laura Rivera, el Ayuntamiento se ha comprometido a estudiar cómo aplicar la reducción horaria de la que disfrutan el resto de funcionarios en verano o en fiestas. No hay acuerdo sobre las horas de reducción que se aplicarían (los bomberos hablan de 72 y el Ayuntamiento estima que deben ser unas 55), pero se está avanzando en este tema. También en lo relativo al solape de guardia. «Piden 30 horas anuales y les he dicho que sí», resume la concejala encargada del área de Personal. En el caso del coeficiente reductor de las noches (los bomberos quieren que se les aplique lo mismo que a la Policía en el turno de noche, cuando trabajan 10 horas pero se les cuentan 14 a efectos de jornada) el acuerdo está lejos. «Quieren máximos, y eso no es negociar», insiste la concejala.
Críticas al papel de David Gago
Aunque la mayoría de las cuestiones que ponen sobre la mesa los bomberos afectan a la Concejalía de Personal, los profesionales del Cuerpo han sido también preguntados por el trabajo de la Concejalía de Seguridad Ciudadana, liderada por David Gago, durante esta crisis. Los bomberos dependen organizativamente esta Concejalía. «Desde que han empezado estas reivindicaciones» David Gago «no nos ha ayudado en nada», ha lamentado Miguel Ángel Jurado.
El concejal de Seguridad Ciudadana, siempre según los bomberos, «se ha puesto de perfil, no ha mediado en la negociación directa con Personal y no ha defendido nuestros derechos. En este aspecto», ha concluido Jurado, «estamos desprotegidos por nuestro concejal».
