El club de fútbol más feliz de España no juega en el Camp Nou ni el Bernabeú. Lo hace en un estadio conocido por estos lares, llamado La Llanera y donde todo el mundo estará dispuesto a pagar el café en el descanso durante una buena temporada. Ahí es donde ejerce como local el Club Deportivo La Bañeza, un equipo leonés de Primera Regional (una categoría por debajo de Tercera Federación), que ha vendido 670 décimos del Gordo de la Lotería de Navidad. Es decir, 268 millones de euros repartidos entre sus socios, su entorno y sus jugadores, claro.
Según han publicado varios medios leoneses, toda la plantilla sin excepción llevaba al menos un décimo, pero es que, además, cada jugador recibió nueve más para vender entre su familia y amigos. Así que cada cual no solo se quedó con un boleto que tiene un premio de 400.000 euros, sino que repartió 3,6 millones más entre los suyos. Todos ellos tienen razones para celebrar este lunes, vestidos del morado corporativo, en un pueblo que en agosto lloró por los fuegos y hoy sonríe por la lotería.
En lo que respecta a la provincia de Zamora, la suerte de La Bañeza también ha llegado aquí. Y lo ha hecho principalmente gracias a dos futbolistas que son de Benavente y que juegan en el equipo de esta localidad vecina. Los dos se quedaron con un décimo para cada uno y vendieron los nueve restantes entre su gente. Todos en su localidad natal. De su mano, han llegado ocho millones de euros del Gordo a la ciudad benaventana.
Sus nombres son Jesús García González, portero del equipo, y Jorge Andrés Fernández «Anfer», uno de los extremos. Los dos tienen 22 años, y atienden a este medio eufóricos: «Yo se lo vendí todo a la familia», celebra el guardameta, ataviado con la misma camiseta con la que dos días antes había jugado en Zamora frente al NoName. «Estaba en el gimnasio, me enteré y para acá», señala este joven, que había llegado esta temporada a la entidad. En el momento justo.
Aparte del fútbol, Jesús trabaja en una empresa de paquetería en Benavente. El fútbol da para divertirse y poco más. Lo de la lotería compensa bien los esfuerzos de ir y venir a entrenar y a competir. Lo mismo le ocurre a Anfer, que estudia Cafyd en León y que va y viene de La Bañeza a la capital vecina para poder compaginar los estudios con la pasión por el balón. «Yo mis décimos los repartí entre familia y amigos, pero en Benavente todos», destaca el jugador.
Ocho millones para Benavente
«Hemos llevado la felicidad para allí», insiste Anfer, antes de irse de nuevo a celebrar con sus compañeros. Entre los diez décimos de Jesús y los diez suyos son ocho millones de euros para su gente en Benavente. Dependiendo de la circunstancia de cada cual, una vía para solucionarse la vida. O, al menos, para ponerla cuesta abajo, que no es poco. El CD La Bañeza lleva siete victorias consecutivas, pero el 79.432 se ha gritado más que cualquier gol.
