Si uno va con un poco de tiempo, puede encontrarse con auténticas joyas. Conviene, eso sí, dedicar tiempo a mirar, a preguntar, a interesarse y, sobre todo, a buscar. Cinco libreros de viejo de Castilla y León y de otros puntos de España, además del propietario de la zamorana Volumen2, ocupan desde este viernes y hasta el 16 de noviembre la plaza de la Constitución con una nueva edición de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, que este año cambia de ubicación para alegría de los vendedores. Hay ahí más de 30.000 libros esperando a quien se los lleve a casa. «Si alguien pudiera venir un día entero aquí, no le daría tiempo a verlos todos», celebran los impulsores.

Uno de ellos es Abel Bieitio, que es además vicepresidente de la asociación sectorial de Castilla Y León. «Se puede encontrar de todo, desde libros muy antiguos, de hasta 1750, hasta los clásicos», pasando por libros modernos que ya no forman parte de las librerías tradicionales debido a la gran velocidad a la que se mueve el sector». El sector se agarra a estas ferias para alcanzar al público más general ya que, apuntan los propios libreros, el lector tradicional que llega a las librerías de viejo de las ciudades suele ser el de una persona más entrada en años que busca libros bastante específicos. Hay, de hecho, secciones de literatura infantil y juvenil bastante generosas en la mayoría de los puestos.
Por su parte el concejal de Promoción Económica, David Gago, ha celebrado la nueva visita de los libreros de viejo a la ciudad, que llegan en la edición número 32 de la feria, retrasando la fecha (solía celebrarse a finales de septiembre y principios de octubre) y cambiado de ubicación. «La esperanza es que vaya muy bien, pues este año es en un lugar más céntrico». Igual que los libreros, en concejal ha llamado a los zamoranos a buscar entre las estanterías para «encontrar tesoros, ediciones curiosas, libros locales y rarezas que no se pueden encontrar en otro sitio».

 
			         
			         
														 
	 
															 
															