«Cuando la dislexia entra en una casa se convierte en una dificultad que ya no desaparece. Hay que convivir con ella día a día». Quien afirma esto es una mujer llamada Belén López, presidenta de la asociación Disfam Zamora. Este colectivo cumple diez años en la batalla por la concienciación y el apoyo a quienes padecen este problema que puede alterar los resultados educativos y condicionar el aprendizaje. La idea del colectivo es paliar las consecuencias.
Para ello, Disfam Zamora sigue organizando actividades y eventos que permitan dotar de herramientas a las familias y al profesorado, habida cuenta de que es el ámbito de los estudios el que se sitúa en la diana cuando aparece esta dificultad. La próxima cita para la asociación tendrá lugar durante los días 3 y 4 de octubre con unas jornadas previstas en el Ramos Carrión.
Este evento se ha presentado durante la mañana del lunes en la sede de la Fundación Caja Rural, que colabora con Disfam, al igual que la Diputación y el Ayuntamiento de Zamora. Desde la institución municipal, la concejala de Juventud, Sara de la Higuera, ha destacado la importancia de avanzar en la inclusión educativa con jornadas como estas, que se celebrarán bajo el título «La difícil búsqueda de las letras extraviadas».
López ha añadido a continuación que el eslogan tiene que ver con una realidad: «Todas las letras les bailan. Cargan con una mochila negativa de autoconcepto, de autoconfianza», ha señalado la presidenta de Disfam en relación a las personas que padecen este problema. Y contra eso, soluciones. Como las que aportarán «ponentes de primer nivel nacional», como Beatriz Hoyos, Araceli Salas, Iván Amado y Begoña Ibarrola.
Además, ese mismo fin de semana, el domingo 5 de octubre a partir de las once y media de la mañana, tendrá lugar una gala benéfica en favor de la asociación, con la participación de un grupo de teatro, de la escuela Escena, de Charo Jaular o de Cacia.
Según los estudios de la asociación a nivel nacional, entre un 5 y un 10% de la población padece dislexia: «Se puede identificar porque desde pequeños tienen una forma de comunicarse costosa, diferente, con omisiones, sustituciones, lectura entrecortada y mala comprensión», ha recordado Belén López.