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Las temperaturas comienzan este viernes su lento pero imparable descenso después de que se alcanzaran máximas de 37 grados en la jornada del jueves. Para el viernes se anuncian máximas de 35 grados a las horas centrales del día y mínimas de casi 20 grados, más normales en agosto que ya en la segunda quincena de septiembre. El día estará nublado, lo que mitigará el calor, e incluso podría llover por la tarde-noche.
Las temperaturas bajan un escalón más el sábado y se desploman el domingo, con máximas previstas de 23 grados que se registrarán también durante los primeros días de la semana que viene, según la previsión.