Los 23 niños y niñas saharauis del programa Vacaciones en Paz han emprendido este lunes el regreso a casa tras un verano en Zamora. Esta vez, su estancia con las familias de la provincia ha sido más corta por culpa de los problemas administrativos que demoraron su venida hasta mediado el mes de julio. Aún así, han sido seis semanas auspiciadas nuevamente por la Asociación Zamora con el Sáhara.
La despedida oficial ha tenido lugar en las dependencias de la Diputación de Zamora, con la presencia del presidente de la institución, Javier Faúndez, y de varios de sus vicepresidentes. Esta institución, como el Ayuntamiento de Zamora, la Junta o Caja Rural han contribuido para costear la estancia de los niños junto a las familias.
«Hoy, cuando decimos hasta pronto, recordamos que este programa no solo mejora temporalmente la vida de los niños y niñas saharauis, sino que también teje puentes de amistad y solidaridad que unen para siempre a Zamora con el Sáhara Occidental», han apuntado desde la Diputación.