La asociación Jambrina en Lucha ha anunciado este miércoles la presentación de alegaciones para exigir que se archive el proyecto de Enagás para la inyección de biometano al gasoducto Salamanca-Zamora. «Las parcelas donde se pretenden situar las instalaciones siguen pendientes de ser restituidas tras la multa impuesta a una de las empresas promotoras de plantas de biogás», han advertido desde el colectivo.
Jambrina en Lucha ha explicado que la empresa Enagás Transporte «ha obtenido la declaración de utilidad pública para su proyecto de instalaciones al gasoducto de Salamanca-Zamora con el fin de inyectar biometano en el término municipal de Peleas de Abajo».
Ante esto, «desde el pueblo de Jambrina y su asociación» muestran su desconcierto al ver que las parcelas donde Enagás quiere llevar a cabo su proyecto «son las mismas en las que la empresa promotora Norton Dos Ibérica fue multada por iniciar unas obras sin evaluación ambiental aprobada para la instalación de una planta de biogás tras la denuncia de vecinos y asociaciones». «Actualmente, no se han restituido a su estado original las parcelas afectadas y el asunto está en los tribunales por un posible delito ambiental por parte de la empresa Norton Dos Ibérica», han recalcado desde el colectivo.
Para la asociación, «la falta de transparencia en la tramitación de estos proyectos energéticos se ve agravada por la ausencia de un marco legislativo adecuado». La Junta «no ha podido aclarar cuando piensa aprobar el decreto o plan regional para el biogás en la comunidad, un documento clave para establecer las distancias mínimas entre instalaciones industriales de este tipo o las distancias mínimas a las poblaciones teniendo en cuenta criterios como los vientos predominantes o la sensibilidad social». Este último punto es especialmente importante para los vecinos de Jambrina y los pueblos de los alrededores.
En el caso concreto de Enagás, algunos de los argumentos clave de las alegaciones son las propias resoluciones de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta «donde se reconoce que las parcelas en cuestión son un área sensible para aves esteparias como el sisón y la avutarda».