El sector del vino nota ya la tensión comercial existente con Estados Unidos desde la llegada a la Presidencia de Donald Trump y acusa en Zamora, solo entre los meses de enero y abril y a la espera de nuevas restricciones, una caída de las exportaciones al país norteamericano de más del doce por ciento. Los datos los pone sobre la mesa el Instituto de Comercio Exterior en su último informe, que apunta que las bodegas y empresas dedicadas a comercializar vino han cerrado operaciones, en los cuatro primeros meses del año, por valor de algo más de 561.000 euros.
La situación es problemática para el sector porque Estados Unidos es uno de los principales socios de las empresas dedicadas al vino. Incluso en una tesitura complicada para la actual, el 17% de las exportaciones de vino que salen de la provincia a otros países viajan con destino al país norteamericano. Los datos que se van registrando este año, unidos a los anuncios sobre próximos aranceles, avanzan ya que no se alcanzarán los registros de ejercicios pasados. El año pasado, sin ir más lejos, las empresas del vino facturaron en Estados Unidos más de 1,74 millones de euros.
Por lo que refiere al ranking de países compradores de vino con origen en Zamora, ya sean elaboraciones con denominación de origen, sin ella o catalogadas como vino de mesa, Estados Unidos solo está superado por Alemania, donde este año se han superado los 609.000 euros en venta entre los meses de enero y abril. Tras el gigante norteamericano se sitúan ya Suiza, Brasil, Canadá, Japón y China. En total, en todo el mundo, las empresas zamoranas han vendido en los cuatro primeros meses del año producto por más de 3,2 millones de euros, un 33% más que en el mismo periodo del año pasado, lo que habla de una buena salud del sector empañada en parte por decisiones comerciales como las que ahora plantea Donald Trump.
Preocupación en el sector
Mientras, y ante el aviso de nuevos aranceles, la Federación Española del Vino (FEV) asegura que ha recibido con preocupación informaciones no oficiales sobre la posible exclusión del vino y los vinos aromatizados del acuerdo comercial que la Unión Europea está negociando actualmente con el gobierno estadounidense.
“Nos preocupa profundamente la posible exclusión del vino de la lista de productos sensibles incluidos en el paquete del acuerdo”, han señalado desde la federación. A lo que añaden que “el sector vitivinícola europeo ya atraviesa un período extremadamente difícil y el establecimiento definitivo de un arancel ad valorem solo agravaría esta crisis y perjudicaría a miles de bodegas y viticultores de todo el país”. En este sentido, han instado a la Comisión Europea a garantizar que el vino y los vinos aromatizados sigan siendo parte integral del paquete de negociación con el gobierno estadounidense.