Noventa ajeros, cinco más de los que participaron el año pasado, se darán cita los días 28 y 29 de junio en la Feria del Ajo. Un crecimiento que se produce amparado por un fuerte crecimiento de la producción, que tiene como consecuencias las intensas lluvias de los últimos meses y el calor de estos días recientes, que está dejando un buen secado del ajo ahora que se está arrancando. «El cultivo de este año es excelente y está dejando unos ajos bastante grandes», remarca Óscar Rojo, encargado del Servicio Agrario de Caja Rural de Zamora. El problema viene, como sucede en los últimos años, derivado de la ausencia de mano de obra para hacer las ristras, un trabajo todavía 100% manual que se realiza, habitualmente, en familia.
Los puestos ocuparán la avenida de Las Tres Cruces entre los cruces con las calles de la Amargura y del Regimiento de Toledo. La extensión de la feria no da para más, y definitivamente atrás quedaron ya aquellos tiempos en los que los puestos ocupaban toda la extensión desde el inicio de la calle hasta el crucero, con productores también ocupando las bocacalles de las calles aledañas. Fuentesaúco, con doce puestos, es la localidad que más aporta, seguida de El Maderal (diez) y La Bóveda de Toro (8). La feria se inaugurará el 28 de junio a las doce del mediodía y se clausurará el día de San Pedro a las 13.00.

Caja Rural destina casi 1.500 euros en premios a los participantes en la feria. Los premios de los montones son de 250, 200 y 150 euros y los premios a las ristras, de 200, 150, 100, 80 y, para los clasificados entre el quinto y el décimo lugar, de 60 euros. También se han programado tres actuaciones, del Aula de Folklore La Morana (sábado 28 a las 12.00), Luis Antonio Pedraza (sábado a las 19.30) y Grupo de Coros y Danzas Doña Urraca (29 de junio a las 12.00).
El concejal de Promoción Económica, David Gago, celebra por su parte el incremento de asistentes a la feria en un contexto nacional en el que los eventos de este tipo registran cada vez menos participantes. Una tendencia a la que se suma la Feria de la Cerámica y la Alfarería Popular, que este año ocupa el cien por cien de los puestos de alfareros y que tiene una importante lista de espera entre los ceramistas.