El presidente de la Diputación, Javier Faúndez, ha reclamado este sábado, en su discurso por el Día de la Provincia, que Zamora juegue «con las mismas condiciones que el resto de territorios» para poder aspirar a «un futuro justo». La frase ha sido el anticipo de las exigencias a Renfe por el tren y de otras demandas al Gobierno de España, como la vinculada a la financiación local o a la ejecución de la A-11 hasta la frontera con Portugal.
En línea con el relato habitual, Faúndez se ha mostrado exigente con el Estado y amable con la Junta de Castilla y León, cuyo presidente, Alfonso Fernández Mañueco, ha estado presente en la jornada celebrada en Villarrín de Campos. El mandatario alistano también ha hablado mucho de lo que le compete, y ha defendido un modelo de gestión basado en «escuchar, transmitir y resolver».
De hecho, por ahí ha empezado Faúndez, tras un agradecimiento particular a los alcaldes que trabajan por los pueblos desde el terreno: «A lo largo de estos dos años como presidente, he mantenido más de 1.200 entrevistas para conocer de primera mano vuestras inquietudes», ha recalcado el dirigente provincial, que ha puesto sobre la mesa el papel clave del Consejo de Alcaldes a la hora de filtrar las demandas comunes.
En la resolución de esos problemas, Faúndez ha incidido en la importancia de actuar con pragmatismo y ha definido a su equipo de Gobierno como un grupo «resolutivo». «Aplicamos a diario el lema ‘un problema, una solución'», ha asegurado el presidente provincial, que ha aclarado que, bajo su mando, «si se puede hacer, se hace; si no se puede, no se hace, pero no se enreda».
A partir de ahí, Faúndez ha ido a las acciones concretas, como las «más de 1.700 obras de todo tipo» que han sido impulsadas «con más de 90 millones de euros de inversión», los recursos destinados al mantenimiento del patrimonio, el adelanto de los planes provinciales hasta 2027, las actuaciones en carreteras o en abastecimiento, la pacificación del servicio de bomberos con el parque de Toro en el horizonte o la futura puesta en marcha de un contrato para prestar servicios financieros en los pueblos.
De igual modo, Javier Faúndez se ha referido a las ferias o al esfuerzo en los polígonos antes de citar a la Junta como «un aliado fiel» para la causa. Aquí, el presidente provincial ha enumerado algunos de los proyectos que cuentan con financiación autonómica, como los vinculados a la depuración o a los servicios sociales, y particularmente los que tienen que ver con el Plan de la Raya.
A partir de ese momento, las reivindicaciones: la primera, sobre la financiación local: «Si no es justa, en un futuro va a ser complicado prestar los servicios esenciales», ha advertido Faúndez, que ha reclamado «recursos suficientes, estables y equitativos para poder prestar los mejores servicios en cualquier parte del territorio».
Todo, con el objetivo de retener población y de atraerla, si es posible. Faúndez, nacido en Alemania de forma circunstancial por la emigración laboral de sus padres, ha recordado las salidas de miles de zamoranos al exterior y ha abogado por ofrecer alternativas a quienes acuden a la provincia a desarrollar su proyecto de vida.
En estos momentos, el programa «Mi pueblo acoge» aspira a conectar las necesidades de las comarcas con las de los potenciales repobladores: «Gracias a esto, nuestros empresarios están cubriendo esos puestos de trabajo y vuelve la alegría de ver niños en las calles de nuestros pueblos», ha resaltado el mandatario alistano.
Críticas a Renfe
¿Y cómo llegan los de fuera a Zamora? Aquí ha sido el momento de atizar a Renfe: «Los servicios ferroviarios son fundamentales para vertebrar esta provincia. De un día para otro, sin previo aviso, con engaños previos, con una decisión política planificada, se ha privado a la comarca de Sanabria-Carballeda y a los zamoranos de un servicio que había cambiado para bien su forma de vida», ha lamentado Faúndez.
«Con esta decisión arbitraria, caprichosa e incoherente», ha insistido, «se ha hecho un daño irreparable a esta provincia». Para el presidente de la Diputación, cuando la política deja abandonado al ciudadano y no cumple con su función, deja de tener sentido». Por eso, ha exigido «la inmediata restitución de las paradas suprimidas en esta provincia». «Que nadie piense que nos vamos a aburrir ni a bajar los brazos en esta reivindicación», ha afirmado.
Más allá de esto, Faúndez ha pedido la fiscalidad diferenciada o la construcción de la autovía A-11 antes de rematar con elogios a los galardonados en los premios Tierras de Zamora. «Seguiremos trabajando, con constancia, con el único objetivo de construir cada día una provincia mejor», ha concluido el presidente de la Diputación.