La Diputación de Zamora publicará la semana que viene, en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), las bases del anunciado plan de reparación de caminos rurales asfaltados, una iniciativa con una dotación de siete millones de euros, novedosa y que llega después de que la institución haya considerado controlada la situación en su red de carreteras. Este era el siguiente paso y llega ya, para alivio de muchos de los ayuntamientos demandantes, que entienden que sus vecinos precisan de esas conexiones en buen estado, pero que carecen de financiación para acometer los arreglos por sí mismos.
En este plan, los pueblos no tendrán que aportar nada más allá de la solicitud. Toda la parte económica de la obra correrá a cargo de la Diputación. Así lo ha explicado, en rueda de prensa, el presidente de la institución provincial, Javier Faúndez, que ha señalado que la elección de los caminos que se arreglarán se hará por concurrencia competitiva y con una dotación de cinco millones a cargo del plan especial de inversiones anunciado hace meses y otros dos dentro del presupuesto para el ejercicio 2026: «A partir de ahí, será año electoral y veremos», ha deslizado el mandatario alistano.
Todo apunta a que, por lo pronto, en este mandato se llegará hasta aquí en una convocatoria con varios condicionantes. Entre ellos, que no se arreglarán aquellos caminos que ya se hayan beneficiado de otras actuaciones integrales en los diez últimos años. También quedarán excluidos los que ya planea adecentar otra administración, los casos del Camino del Lobo o de la Ferreras de Arriba – Otero de Bodas por parte de la Junta.
Además, no se actuará en aquellos trazados que dispongan de una carretera provincial alternativa cercana o en los que se demanden para facilitar el acceso para plantas de biogás o hidrógeno verde, donde se dejará la responsabilidad a la empresa.
En cuanto a los plazos, los ayuntamientos tendrán veinte días para hacer sus solicitudes una vez se publiquen las bases en el BOP. No hará falta acuerdo inicial de Pleno, solo cuando se haya adjudicado la obra, ni tampoco memorias valoradas o proyectos. Apenas el nombre del camino, la longitud y un compromiso de limitación del tonelaje al paso por estas vías.
Los criterios de puntuación
Los criterios de puntuación se establecerán de tal modo que los caminos que unan tres o más localidades recibirán siete puntos; los que unan dos, cinco; y los que conecten con una carretera nacional, tres. También habrá seis puntos para los caminos asfaltados que tengan transporte escolar o transporte a la demanda certificado por la Junta. Igualmente, se otorgarán cinco puntos para las vías que se hayan ido arreglando con fondos de los planes de obras y precisen de un remate. En caso de empate a puntos, se usarán criterios de mayor población.
En todo caso, Faúndez ha matizado que los técnicos van a tener mucho que decir en este caso: «Si se cree que están en buen estado, no actuaremos», ha recalcado el presidente provincial, que ha indicado que, en el caso de los caminos que afectan a varios ayuntamientos, ambos tendrán que formalizar la solicitud para que se actúe sobre el tramo al completo.
La idea de la Diputación es haber resuelto la convocatoria en un plazo máximo de seis meses para que todo se ejecute en 2026 a través de un contrato de firmes, «una fórmula muy ágil».