El Ayuntamiento de Zamora pone sobre la mesa un extra de 100.000 euros para que, en caso de que sea necesario, vayan destinados a aumentar el presupuesto base de licitación de la obra de la cubierta de la Catedral, consistente en la puesta en marcha de un ascensor en la torre y en la instalación de una pasarela que permitirá contemplar el cimborrio desde una escasísima distancia. El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, detalló que esta cantidad es una dotación que se habilita «para usar en el caso de que sea necesaria», aunque el Ayuntamiento está de momento contactando con empresas de la zona para poder desbloquear la situación.
El equipo de Gobierno encuadra el hecho de que la obra haya quedado desierta, más que en una cuestión económica, en el hecho de que la gran cantidad de obra pública que hay ahora mismo en marcha tiene al límite a las empresas de construcción. Aseguraba este miércoles el alcalde de Zamora que en la actualidad cada obra licitada en la Plataforma de Contratación del Sector Público congrega a una media de 1,3 empresas, la cifra más baja de las que se recuerdan. «El nivel de inversión que hay en Zamora es el más alto de la historia», lo que hace que cueste encontrar empresas con capacidad para comenzar trabajos con sede en la ciudad o en su entorno.
Lo cierto es que licitar y conseguir un adjudicatario para las obras en la cubierta de la Catedral corre cierta prisa. Van financiadas con cargo al Plan de Sostenibilidad Turística y, aunque se ha dado una prórroga de tres meses para justificar los gastos (hasta el 31 de marzo de 2026) sí que hay que tener alcanzados ciertos hitos para poder acceder a los fondos comunitarios que financian esta actuación. Se trata de una obra importante, pues asciende a la cifra de 709.000 euros (impuestos incluidos), cantidad que ahora podría aumentar.
El Ayuntamiento también aprobó ayer una partida de más de 300.000 euros para acometer la obra del ascensor de San Cipriano, que salvará el gran desnivel existente en la zona. Se trataba de una actuación que se iba a financiar también con el Plan de Sostenibilidad Turística, pero los reparos que ha puesto la Comisión de Patrimonio a la documentación presentada por el Ayuntamiento de Zamora han alargado aún más si cabe los ya dilatadísimos plazos que se manejan en estas instancias.
El Ayuntamiento ha asumido que es complicado que la obra se pueda ejecutar con los fondos del Plan porque no se va a llegar en plazo y, «para que no se quede sin hacer», se ha decidido pagar las actuaciones con cargo al presupuesto municipal.