El Ayuntamiento de Morales del Vino da ocho días, a contar desde este lunes, a Primus Invictus para que entregue las llaves del centro deportivo Morales Sport. Si no lo hace, los responsables municipales entrarán en las instalaciones deportivas «por la fuerza», con la ayuda de un cerrajero si es preciso. El Pleno ha aprobado, con los votos a favor de PP y PSOE y con la abstención de Vox y UPL, el secuestro de la concesión, otorgada a Primus Invictus (ligada a Arcebansa) como consecuencia del contrato de construcción y explotación de Morales Sport en el año 2013. Con este acuerdo, el Ayuntamiento tomará posesión de las instalaciones, procediendo con ellas «como mejor se estime». «Cuando entremos, nos pondremos rápido a trabajar para recuperarlas», apunta la alcaldesa, Carmen Lorenzo.
Morales del Vino toma esta decisión en un Pleno extraordinario convocado con apenas unas horas de antelación en la que, primero, se ha dado cuenta del dictamen del Consejo Consultivo de fecha de 12 de mayo, documento que justifica la resolución del contrato de explotación del recinto deportivo sin necesidad de esperar a las resoluciones judiciales, que siguen su camino. El Consultivo considera más que probado que el contratista ha cerrado las instalaciones de manera injustificada, que ha faltado a sus obligaciones de vigilarlas, que las ha abandonado provocado la vandalización actual del recinto y que no ha cumplido con los pagos de la luz, el gas ni con el alquiler pactado con el Ayuntamiento de Morales del Vino, de solo 1.200 euros anuales.
El dictamen del Consultivo, leído íntegro por la alcaldesa en el Pleno extraordinario del lunes, asegura que el Ayuntamiento «no tiene responsabilidad en el estado actual» de Morales Sport y considera probadas las deficiencias en las instalaciones que ya se documentaron a finales del año 2023. Ahora, año y medio después, su estado es significativamente peor y los 278.000 euros en los que se estimaron los desperfectos se quedarán ya seguramente cortos. «Todas las deficiencias observadas se producen por la falta de mantenimiento, no por la deficiencia en los materiales utilizados», indica el dictamen.
Y es que Primus Invictus, de forma sorprendente, asegura que la obra de Morales Sport se realizó con unos materiales peores que los que se reflejaban en el proyecto. Sorprendente reconocimiento porque la obra la realizó Arcebansa, empresa ligada a la que después ha explotado el recinto. «Muchas deficiencias se registran en origen y motivan que el Ayuntamiento no debería haber recepcionado las obras» en el año 2015, alega Primus Invictus. No lo considera probado el Consejo Consultivo, pero resulta muy llamativo el hecho de que la concesionaria intente desligarse del mal estado de conservación alegando unos defectos de contratación en los que la misma empresa hubiera tenido mucho que ver.

Por lo demás, el informe redunda en que la falta de demanda que alega Primus Invictus para justificar el cierre de las instalaciones es responsabilidad directa del concesionario, que apunta a las restricciones de la pandemia como causa del cierre de parte de las dependencias de Morales Sport. No dedica un gran esfuerzo el Consultivo en recordar que la pandemia está ya superada.
Sea como fuere, Primus Invictus tiene ahora ocho días para entregar las llaves o para oponerse a la decisión del Pleno. Cuestión esta última, asegura Lorenzo, que no influye en el resultado final de lo votado este lunes, porque los operarios municipales entrarán a Morales Sport con las llaves o, dentro de poco más de una semana, con la ayuda de un cerrajero. Se documentará de forma fotográfica el estado de las instalaciones, vandalizadas en repetidas ocasiones y ya sin máquinas.
La única intervención destacable del Pleno a mayores la de la alcaldesa fue la de Juan Bartual, concejal de Vox, que insiste en que la decisión tomada el lunes podría haber sido adoptada en diciembre de 2023. «El Consultivo se posiciona ahora porque es cuando se lo hemos pedido, pero podría haberlo hecho antes», insiste Bartual. La alcaldesa, por su parte, subraya que «los abogados recomendaron no secuestrar la concesión en 2023 y eso es lo que hizo este equipo de Gobierno, que se debe a las recomendaciones de los abogados y a las decisiones de los jueces. Es muy fácil decir que se secuestre la concesión cuando se está ahí», en la oposición, «pero la que lo tiene que firmar soy yo», apuntaba la alcaldesa. El razonamiento de Vox y UPL es que la concesión no se ha secuestrado antes para «dejar pasar diez años» desde la recepción de la obra y eximir a Arcebansa de los posibles defectos en la construcción. «Por eso nos abstenemos», argumentaban después de que la alcaldesa les afeara su postura justo al final del Pleno. «Parece que les da igual todo», afirmaba Carmen Lorenzo antes de abandonar la sala.
La piscina de verano «se abre sí o sí»
Mención aparte en el Pleno para la piscina de verano, que el Ayuntamiento de Morales del Vino ha prometido abrir en la próxima temporada aunque, a día de hoy, su estado sea calamitoso. «La piscina se va a abrir sea como sea, aunque nos tengamos que poner nosotros en las taquillas», apuntaba Carmen Lorenzo. Lo primero es, con todo, conseguir entrar al recinto, ya que la piscina forma parte del mismo todo que Morales Sport. Luego habrá que valorar el estado general, que es malo, con una zona verde difícil de recuperar, duchas rotas y farolas caídas. Habrá que vaciar los vasos y volverlos a llenar. «Lo que no puedo decir es cuándo se va a abrir exactamente, si el 20 de junio o unos días después, pero se va a abrir».

Preguntó Bartual aquí por la obligación de que las piscinas depuren su agua por rebosamiento perimetral y no por el tradicional sistema de depuradora «skimmer». En este punto, la alcaldesa aseguró que el Ayuntamiento ha establecido ya conversaciones con Sanidad para que la piscina, «evidentemente, se abra con todas las garantías para los usuarios. Eso es innegociable», zanjaba.