Rearasa, la única empresa que presentó oferta para realizar las obras de la pasarela en la cubierta de la Catedral de Zamora, no ha presentado la documentación que faltaba en su plica en el plazo establecido y la Mesa de Contratación ha decidido excluirla del proceso. Al no haber más empresas interesadas en la licitación de la obra, que salió en el mes de abril por un total de 644.712,81 euros más impuestos, se propone a la Junta de Gobierno Local que declare el proceso desierto.
Un palo en la rueda, uno más, de un proyecto que ya se alarga demasiado. Los primeros problemas vinieron por los problemas detectados en la Comisión de Patrimonio de Zamora, algo que obligó a enviar el proyecto a Valladolid, a modificarlo y a aprobarlo ya con el consiguiente retraso. La obra se licitó por el trámite urgente para intentar acelerar los plazos, pero de poco ha servido. Al no haber empresas participantes en la licitación, el proceso vuelve a empezar, detallan fuentes municipales en declaraciones a este periódico. Pasará de nuevo por Junta de Gobierno Local y se subirá de nuevo Plataforma de Contratos del Sector Público. Un proceso que dura meses, apunta Miguel Ángel Viñas, presidente de la Mesa de Contratación.
Cabe recordar que la intención inicial es que las obras estuvieran listas antes de la celebración de Las Edades del Hombre, cuestión descartada hace meses. Ahora se hace ya imposible que estén terminadas este año, otro tema importante porque el proyecto iba a ser financiado en parte con unos fondos europeos que exigen que las obras estén rematadas antes del 31 de diciembre.
Viñas explica que el Ayuntamiento y el Obispado tratarán de analizar lo sucedido y asegura que «no se trata de una cuestión de precio. A nivel local, nacional y regional estamos viendo como hay pocas empresas que se presentan a las obras, puede ser porque haya muchos trabajos en marcha y las empresas de construcción ya no tienen capacidad de asumir más trabajo», añade Viñas.