El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha expresado este martes su preocupación ante la posibilidad de que los trabajadores del área de limpieza viaria de la ciudad vayan a la huelga por sus discrepancias con la empresa encargada de prestar el servicio, Prezero. Esas diferencias vienen por la vertiente económica y se han enquistado de tal modo que solo el Serla previsto para este jueves aparece en el horizonte como una posibilidad real para evitar los paros.
Ante este panorama, Guarido ha explicado que ha habido distintas reuniones entre el Ayuntamiento y Prezero, y también entre el equipo de Gobierno y el comité de empresa. En esos encuentros, el alcalde le ha trasladado a la adjudicataria del servicio que la revisión de precios acordada, que asciende a 350.000 euros tras los dos primeros años de servicio, «se puede distribuir como la empresa quiera, porque no está obligada a nada, pero media un factor ético, moral y lógico» que apunta a la pertinencia de incrementar los salarios.
«Ellos dijeron que el 70 o el 80% de los costes iban a gasto de personal. Ahora, cuando se dice que se les ofrece un 0% a los trabajadores, eso va contra toda lógica. Los empleados también se tienen que ver afectados por esa revisión de precios», ha señalado Guarido, que ha aclarado que Prezero está obligada a prestar el servicio «incluso en caso de conflicto colectivo».
«Si no lo hace, aplicaremos todas las medidas», ha advertido el alcalde, que ha incidido en que «la ciudad no puede verse resentida». «Es evidente que el perjuicio no puede ser solo para Zamora y para los trabajadores. A la empresa no le va a salir gratis, no sería justo», ha zanjado Guarido.