El Ayuntamiento de Zamora ya estudia una intervención para permitir el paseo con seguridad por encima de la parte de la muralla que va desde el templo de San Isidoro hasta el nuevo Museo Pedagógico. Se trata de algo menos de una treintena de metros que permitiría a los ciudadanos contemplar desde allí las vistas de la ciudad hacia el parque de San Martín y la zona de la Feria.
El alcalde, Francisco Guarido, y el concejal de Obras, Pablo Novo, han explicado este martes que el Ayuntamiento presentará una propuesta ante la Comisión de Patrimonio para solicitar la colocación de una valla de protección y para realizar otras pequeñas actuaciones complementarias con el fin de que la gente pueda transitar por el adarve.
Todo, después de la expropiación y derribo de la vivienda ubicada justo en esa zona y la apertura de una calle que, desde estos días, «ofrece un nuevo atractivo en un rincón del casco antiguo», según ha señalado Novo, que ha presentado la primera fase de la intervención, junto a Guarido, en la calle Postigo, entre el Portillo de la Lealtad y la calle de San Isidoro.
«Después de décadas sin ningún tipo de actuación, es este equipo de Gobierno el que continúa dando pasos hacia la materialización de estos proyectos contemplados en el Plan Especial del Casco Histórico», ha advertido Novo, que ha señalado que la intervención inicial ha tenido un coste de 70.000 euros, entre el derribo, el acondicionamiento y la fase de urbanización del vial peatonal.
El concejal ha constatado que la estética y los materiales empleados «son una continuación de los ya existentes en la zona», por lo que se trata de ofrecer un recurso más para un entorno cercano al paso habitual de los turistas.
La trasera de la Catedral
Por otro lado, Novo ha remarcado que el servicio de Contratación ya está impulsando el expediente para la apertura de la anunciada calle en la trasera de la Catedral, una vía que «va a ver la luz gracias a ese excelso clima de diálogo» entre el Ayuntamiento y el Obispado.