La Junta de Castilla y León no considera necesario establecer conversaciones con el Instituto Nacional de la Seguridad Social para el nuevo uso que se plantea en la residencia de Los Tres Árboles, una residencia para personas dependientes en la que Asprosub tendría un papel fundamental. La consejera de Familia y vicepresidenta de la Junta, Isabel Blanco, asegura que el convenio firmado en el año 1995 concede la cesión a la Junta para «uso residencial» del inmueble e incide en que «planteamos que siga siendo de uso residencial para personas con discapacidad, así que es perfectamente compatible».
Blanco espera a que la nueva residencia del Alto de los Curas esté operativa para plantear cómo será la gestión de Los Tres Árboles, «si directa o indirecta, atendiendo a las necesidades que nos planteado Asprosub», pero se muestra tajante al asegurar que «no le vamos a ceder el edificio a nadie. Cuando llegue el año 2027 veremos los condicionantes que hay, pero no habrá ningún problema si se mantiene el uso para el que se transfirió».
La consejera de Familia ha realizado estas declaraciones durante su visita a las obras del nuevo centro residencial de Zamora, que avanzan «a buen ritmo» y que estarán concluidas, si los plazos se respetan, en la primera mitad del año que viene. Lo que deja unos meses más para equipar el centro a las necesidades que tenga de cara a empezar a funcionar en el año 2027. «Van e incrementarse las plazas residenciales en Zamora hasta las 192 plazas que va a tener la nueva residencia, y también la plantilla, pues se pasará de 106 trabajadores a más de 176″. Isabel Blanco descarta que Los Tres Árboles se siga utilizando como residencia de la tercera edad pues, indica, «no queremos generar usuarios de primera y de segunda» y todos los internos, junto con la plantilla, pasarán a las nuevas instalaciones cuando estén listas.
La nueva residencia, que conlleva una inversión de veinte millones de euros en la ciudad, estará por lo demás «totalmente adaptada» para las personas en situación de dependencia, ya que «sus 192 plazas podrían ser utilizadas por personas de este colectivo vulnerable y numeroso» en la provincia.
El futuro centro constará de dos edificios independientes de tres plantas construidos sobre un solar de 13.000 metros cuadrados. Cada una de estas alturas albergará dos unidades de convivencia de 16 plazas por unidad, es decir, un total de 12 de estos espacios en los que vivirán 192 personas y que se estructuran en 14 habitaciones por área, de las cuales dos son dobles y el resto individuales. Además, contará con una zona de cuidados de enfermería con hasta ocho plazas.
A ello hay que sumar las 16 plazas de la unidad de convivencia destinada a centro de día que, si bien se construye con un acceso independiente, está conectado con todos los servicios que podrán ser compartidos con los residentes, como el centro de terapia ocupacional, las estancias de fisioterapia o el comedor.

De este modo, «se configuran espacios asimilables a un hogar, que conjugan los ambientes confortables y domésticos para fomentar la autonomía de los residentes con una atención integral y personalizada de acuerdo con sus necesidades y preferencias», destaca la responsable de la Consejería de Familia. «El objetivo de la Junta es que el centro residencial sea una continuidad del domicilio y la vida cotidiana anteriores».
Además de la orientación de las dependencias, que favorece la entrada de luz natural durante las máximas horas del día posibles, sus instalaciones de alta eficiencia y el uso de fuentes renovables «implican una menor demanda energética, lo cual convierten al edificio en un centro funcional y sostenible». Adopta todas las fases de la denominada economía circular, cuyo resultado será el menor consumo de materiales y energía y una baja producción de residuos.
Residencia de Benavente
La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades cuenta también, en la provincia zamorana, con la residencia ‘Los Valles’ de Benavente, que dispone de 138 plazas para personas dependientes y 80 para válidas —218 en total—. La Junta se encuentra acometiendo, en la actualidad, las obras de remodelación del centro, con el objetivo de implantar seis unidades de convivencia de 16 plazas cada una, es decir, 96 adaptadas al nuevo modelo que establece la Ley.
Ahora mismo se está ejecutando la primera fase, con una inversión de 2,3 millones de euros y que supone la mitad del total de las unidades de convivencia que se van a implantar y que dan cabida a 48 usuarios. El pasado año también se invirtieron más de 200.000 euros en equipamiento e innovación tecnológica para el centro de Benavente.