Diez días después del ataque anterior, los contenedores de la plaza de San Frontis han vuelto a arder tras otra acción vandálica nocturna en el barrio. Según han confirmado fuentes municipales, los hechos han tenido lugar en el mismo punto que a comienzos de enero y han vuelto a provocar un daño económico para las arcas municipales que se estima en 500 euros por contenedor.
Este ataque, junto al resto de los registrados en las últimas semanas, se une a la basura que aparece esparcida por los alrededores de los contenedores en diversas zonas de la ciudad, a las pintadas realizadas en el parque infantil de Las Viñas antes siquiera de que pudiera ponerse en marcha y a los robos de árboles recién plantados en las medianas y aceras de las travesía.
En el caso de los contenedores, los de San Frontis habían sido repuestos recientemente, lo que implica que ha ardido mobiliario completamente nuevo, más allá del riesgo que implica el fuego para los coches y para todas las zonas aledañas del barrio.