– «Yo traigo un león»
– «Yo a Pikachu».
Las decenas de niños asistentes al partido de hoy del Caja Rural – CB Zamora han atendido a la llamada del club y han acudido, porque así estaban citados, al pabellón cargados de peluches. Nuevos algunos, más usados otros, pero todos peluches de las colecciones particulares de la chavalería del equipo que han volado al centro del pabellón como parte de la colaboración que el club tiene con Cáritas Zamora.
Los peluches serán ahora donados a los niños más desfavorecidos, como también los juguetes que los más comprometidos han entregado antes de iniciar el partido. Una bonita iniciativa que ha dado al Ángel Nieto un toque muy navideño en el primer partido del año.
Las lluvias de peluches se han convertido en una iniciativa cada vez más celebrada en recintos deportivos de España. En Zamora las puso de moda el River Zamora, que durante años ha recogido cientos de muñecos destinados a los niños más necesitados. El Balonmano Zamora se sumó pronto a la iniciativa.
El lanzamiento de muñecos se ha llevado a cabo en el descanso de un partido que el Caja Rural – CB Zamora ha competido hasta el último minuto contra el Betis Baloncesto, club con pasado ACB y uno de los gallitos de la categoría. Derrota con honor para los de Saulo Hernández, que han regalado a su afición un vibrante partido justo antes de Reyes.