La Guardia Civil de Zamora da por desarticulado el principal punto de venta de droga de la localidad de Toro. Aunque las investigaciones comenzaron meses antes, fue el 19 de diciembre cuando se puso en marcha la operación Tagaste con la realización de registros domiciliarios en Toro y en Peleagonzalo, los cuales dieron como resultado la aprehensión de una importante cantidad de cocaína, dos vehículos, una moto, dinero en efectivo y útiles utilizados para la preparación y venta de sustancias. Se detuvo a dos personas por tráfico de drogas y blanqueo de capitales.
En total, se requisaron 1.244 gramos de cocaína, 45 gramos de hachís, 200 gramos de marihuana, 65.000 euros, básculas de precisión, útiles para la preparación de la mercancía, cuatro teléfonos móviles, dos coches y una motocicleta, lo que convierte a la operación de una de las de mayor envergadura de las que se han llevado a cabo en la ciudad de Toro.
El juzgado ha decretado la prisión provisional sin fianza para el principal investigado. La presente operación dirigida por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Guardia Civil de Zamora, fue tutelada por el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número uno de Toro y por la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Zamora y contó con apoyo del Grupo Rural de Seguridad (GRS) de la Guardia Civil con base en León, y la USECIC y el Grupo Cinológico de la Comandancia de Zamora.
La investigación
Las pesquisas comenzaron en agosto, cuando la Guardia Civil tiene conocimiento de la existencia de un importante punto de venta de droga en Toro. Se inician entonces vigilancias sobre el lugar, se identifica al principal responsable del punto de venta y a numerosos consumidores. El vendedor tomaba importantes medidas de precaución para vender la droga, siempre en lugares previamente convenidos y de difícil acceso y vigilancia. El principal suministrador resulta ser otro vecino de Toro, que se encargaba además de recaudar el dinero obtenido.
Consecuente con dichas investigaciones y dispositivos de vigilancia, se logra determinar el lugar donde se almacenan las sustancias estupefacientes, un local de ocio nocturno cerrado al público desde hace varios años, ubicado en un lugar de difícil acceso y vigilancia por el escaso tránsito de personas debido a su ubicación. Fruto de las investigaciones y tuteladas por la Autoridad Judicial, se van aportando a la causa numerosos indicios que apuntan a la presunta autoría de las personas detenidas los delitos citados, que cristalizan en la operación llevada a cabo en diciembre del año pasado.