Durante el año 2023, el último analizado por el Instituto Nacional de Estadística, 567 residentes en Zamora se censaron en la Comunidad de Madrid e hicieron el camino de ida que tantas veces repitieron sus paisanos y que, en muchas ocasiones, carece de retorno. Pero no se vaya aún. Aquí viene un giro de guion. En ese mismo ejercicio, llegaron a la provincia 698 personas que residían en la capital de España o en su entorno. El balance fue de +131 a favor.
Algo similar ocurrió con la provincia de Barcelona, otro de los lugares donde tradicionalmente marchaban los zamoranos en busca de oportunidades laborales. A lo largo de 2023, se fueron para allá 91 personas de la provincia, pero aterrizaron aquí, desde ese mismo lugar, 153. Son 62 más para este territorio que casi amplió su capital humano en 200 vecinos gracias al balance con las dos grandes urbes.
Sin embargo, y aunque esto indica una tendencia alentadora, no todos los datos son positivos. A pesar de lo ocurrido con la Comunidad de Madrid y con la provincia de Barcelona, Zamora perdió 271 habitantes en el saldo interprovincial durante el periodo citado, y la explicación principal hay que buscarla en el balance con los territorios limítrofes.
Aquí aparece, como es costumbre, el caso de Valladolid. En ese año, el más reciente de los analizados, se marcharon a la ciudad más poblada de Castilla y León 456 zamoranos. Solo 336 personas hicieron el viaje inverso, 120 menos. Peor fue aún la situación en relación a Salamanca, con un -122 resultante del aterrizaje de 241 charros en los municipios de Zamora y el desembarco de 363 personas de aquí en la provincia vecina. Siempre censados, no cuentan los estudiantes que se marchan para un rato y no cambian los papeles.
El otro caso destacado dentro de la comunidad autónoma es el de León, con 312 zamoranos censados durante 2023 en la provincia limítrofe y 213 recibidos en el intercambio (-99). La parte positiva de este caso y del -341 que Zamora acumula con León, Salamanca y Valladolid, es que la cercanía permite que muchos de esos vecinos que se marchan se mantengan como población vinculada. No es poco.
Más allá de todos estos casos, Zamora tendió a perder habitantes con el resto de las provincias, particularmente con Asturias (-27), con Burgos (-22) o con Ourense (-35). En cambio, ganó en relación a Murcia (24), Alicante (23) o Pontevedra (28).
La edad clave
Los datos del INE también permiten conocer las edades de quienes llegan y de los que se marchan. Eso permite comprobar otro dato negativo para Zamora. En casi todos los grupos etarios hay un cierto equilibrio salvo en el de los menores de 34. Se fueron 1.575 y llegaron 1.323. Casi la diferencia total.