La Asociación Zamorana de los Caminos de Santiago lo tiene claro: hay un «estancamiento» en las peregrinaciones que atraviesan la provincia. Veinte años después de que se empezaran a elaborar las estadísticas de caminantes y ciclistas en las rutas que van a la capital gallega, el colectivo entiende que no ha habido una evolución positiva en las paradas de este territorio, y no es que los datos hayan empeorado particularmente, sino que no se han subido a la ola de crecimiento experimentada en las demás vías.
No en vano, allá por 2004, la Vía de la Plata y el Camino Mozárabe Sanabrés «se posicionaban como unos caminos de futuro, ocupando, por número, el tercer lugar en cuanto a las preferencias de los peregrinos». Veinte años después, estas rutas se sitúan en la octava posición, incluso después de un repunte superior al 4% en relación a 2023.
Respecto de otras variables recogidas en las estadísticas, hay muy pocas diferencias en lo relativo a la procedencia y lugar de inicio de la peregrinación. La más significativa es el aumento del número de peregrinos extranjeros, llegados de medio centenar de países, que ha pasado del 51,63% al 67,77%. Alemania, con un 13,2%, ES el país que más peregrinos aportó el año 2024 a los caminos de Zamora, seguida muy de cerca por Francia e Italia.
En cuanto a la elección del punto de partida de la peregrinación, la mayoría arranca en Sevilla, con un 46,99%, seguida de Zamora con un 11,54% y Granja de Moreruela con un 10,61%. No obstante, en este apartado hay que destacar el incremento que ha experimentado la ciudad de Almería (Camino Mozárabe), que del 0,25% ha pasado a un 3,39%.
De los datos a las reflexiones
En base a las estadísticas, la asociación zamorana se hace una pregunta: «¿por qué no crecemos y vamos en continuo retroceso? Son varias las causas que nos conducen a ello y que venimos analizando en los últimos años. Podemos ver, por ejemplo, la dejadez en los caminos, que pone en evidencia la desidia y falta de compromiso de los responsables de su mantenimiento», se responden a sí mismos desde el colectivo.
A eso se une el hecho de que, de noviembre a marzo, algunos albergues municipales «cierran sus puertas porque no son rentables». Eso lleva aparejado que los peregrinos acaban puenteando estos pueblos, con el riesgo de que también lo hagan con toda la provincia. «Eso ya representaría un problema de muy difícil solución», estiman desde la asociación, que mira a las instituciones para tratar de corregir esta dinámica.
En lo que tiene que ver con los ayuntamientos, estas son las peticiones:
- Deben comprometerse a mantener operativos los albergues públicos durante todo el año y no cerrar durante varios meses en invierno, justificándolo por el bajo número de peregrinos que pasan, porque si no cada vez tendremos menos.
- Es preciso incrementar la capacidad de acogida de los albergues en aquellos meses que sea necesario y siempre que sea posible; una vez hemos identificado cuáles son esos “puntos negros” donde se puede producir dicha incidencia, es factible resolverlo.
- Hay que mantener los caminos en condiciones de tránsito aceptables, verificando periódicamente su estado y señalización.
- El albergue de Zamora, verdadero punto neurálgico de encuentro de los peregrinos que pasan por la ciudad, debe convertirse en el motor que dinamice los caminos y albergues de nuestra provincia. Para ello, es imprescindible que su gestión se asigne a esta asociación jacobea. El aval de nuestra petición se fundamenta es la gestión que realizamos en los albergues de Fontanillas de Castro y de Tábara.
Para la Diputación:
- Tiene que haber una promoción específica y, cuando se promocionen nuestros caminos en las diferentes ferias de Turismo, hay que tener presente que el valor que le otorga su origen, una importante calzada romana por la que aún hoy todavía podemos caminar, no es suficiente. Es necesario incidir en nuestra riqueza patrimonial, gastronómica, cultural, natural…
- La provincia goza de veranos suaves, en los que una parte del día las temperaturas son idóneas para caminar y debe convertirse en un aliciente para la elección de cualquiera de nuestros caminos.
- Cualquier peregrino de cualquier lugar del mundo que llegue a Madrid, debe saber que en hora y media puede estar en Zamora y comenzar a caminar por cualquiera de nuestras rutas.
- Contamos con tres caminos desde Zamora (Vía de la Plata, Camino Sanabrés y Camino Zamorano-portugués), que en 15 días permite a los peregrinos alcanzar su destino. Además son caminos poco masificados y especialmente atractivos.
Para la Junta:
- Ha mantenido un olvido permanente en los últimos años de estas otras rutas menos transitadas, así que debe adquirir un compromiso decidido para la promoción y potenciación de nuestros caminos.
- Una empresa especializada está realizando el plan director de los caminos de Santiago históricos y tradicionales de la comunidad, que estará finalizado antes de que concluya el 2025. Confiamos que sus conclusiones servirán para dinamizar la frágil actividad turística y económica de esos pequeños pueblos a los que nunca llegará un turista y donde se debe aprovechar el paso de los peregrinos para convertirlos en nuestros mejores embajadores ante el resto del mundo.
«Como conclusión y buscando motivos para la esperanza en el futuro, nos encontramos a dos años de la próxima celebración del Año Santo Compostelano. Estamos en el momento idóneo para tratar de salir del estancamiento en el que llevamos décadas por falta de implicación de los que tienen la competencia y la obligación de mantener vivo este legado inmaterial que representa el Camino de Santiago», zanja el colectivo.