Izquierda Unida plantea una moratoria a las autorizaciones de nuevas plantas de biogás en Zamora (y en el resto de la comunidad) hasta que esté aprobado el Plan Regional correspondiente, ahora en tramitación. La coalición presenta una moción en este sentido al Pleno de la Diputación de Zamora, institución sin competencias en esta materia pero a la que se pide que interceda ante la Junta para pedir la paralización de nuevas licencias.
Insiste Izquierda Unida en que hay «al menos once proyectos en marcha en la provincia de Zamora», en El Cubo del Vino, Peleas de Abajo, Coreses, Santibáñez de Vidriales, Peleagonzalo, Santovenia, Barcial del Barco, Camarzana de Tera, Cerecinos, Vega de Tera y San Cebrián de Castro. «En muchos casos estos proyectos están provocando incertidumbre y temor, no sólo entre los vecinos y vecinas de los pueblos donde se propone su ubicación, sino en muchas localidades cercanas, lo que ha llevado a que parte de la población rechace de plano estas instalaciones y se movilice en su contra», argumenta IU.
La formación hace propios los argumentos de las plataformas en contra de la instalación de plantas de biogás y habla de «la gran toxicidad de los gases que se generan en el proceso de producción y las sustancias químicas y metales pesados que terminarían en el agua afectando a la salud; el trasiego de camiones cargados de residuos en las carreteras; los olores de las descargas y del producto resultante del proceso; y sobre todo la amenaza del efecto llamada de estas instalaciones para la proliferación de macrogranjas, así como la posibilidad de procesar restos aún más tóxicos como los residuos industriales para hacer que estas plantas de gas metano sean realmente rentables».
Izquierda Unida considera que la producción de energía que aprovecha restos orgánicos puede ser una oportunidad pero pide «garantías de que el proyecto cuente con la población y que el uso de energía sea local». Además, consideran que el gran número de plantas que proyectan instalarse en Zamora «pueden acabar convirtiendo a esta provincia en un territorio vaciado destinado a la producción de energía exportable, si no en un estercolero, como dicen quienes se oponen a tener estas instalaciones al lado de sus casas y de sus tierras».
La coalición destaca, además, lo vivido en la provincia en épocas pasadas con la construcción de embalses y en tiemps más recientes, con la puesta en marcha de plantas solares y eólicas que han dejado ya algunas zonas «saturadas».