La Consejería de Medio Ambiente anuncia que «seguirá trabajando» en la zona de los Cañones del Duero para que Zamora pueda acoger linces en un futuro. El consejero del ramo, Juan Carlos Suárez-Quiñones, asegura que la decisión de mandar los primeros ejemplares al Cerrato palentino, tomada por una comisión nacional, no elimina las aspiraciones de la provincia zamorana a acoger al felino. «Seguiremos buscando la aceptación social en Zamora, que quizás ahora pueda ser más fácil de lograr cuando se compruebe cómo transcurre la reintroducción en Palencia y las ventajas que conlleva», apunta el consejero.
La Junta explica que, si bien tanto la zona de los Cañones del Duero como el Cerrato reunían las condiciones necesarias para garantizar un buen hábitat al felino, distintos factores han hecho inclinar la balanza a favor de Palencia en esta primera etapa. Primero, el estudio de población de conejos en la zona ha determinado que hay más ejemplares en Palencia que en Zamora. Y segundo, y más importante, la aceptación social. El 93% de los ciudadanos palentinos preguntados estaba a favor del lince, un porcentaje que en Zamora se ha quedado por debajo del sesenta por ciento.
Sin embargo, ya nadie habla de plazos. El lince llegará a Palencia en primavera y los trabajos de campo continuarán en Zamora, pero sin horizonte temporal previsto para volver siquiera a plantear una reintroducción de la especie en la provincia. Zamora pierde así un potencial turístico importante, el de los visitantes que se mueven para presenciar al felino, un visitante similar al que llega a Zamora para visitar al lobo.